"He llorado mucho, he tenido depresión": la dura reflexión de Hilary Duff sobre la lactancia
"Me sentía como una fracasada todo el tiempo".
La lactancia materna es, para muchas madres, reconfortante y exigente a partes iguales. Horas y horas sacando leche, esterilizando instrumentos, y dando el pecho. Todo, sin apenas descanso.
La actriz y cantante Hilary Duff —que conocerás por ser una chica Disney y protagonizar la serie Lizzie McGuire— se ha sincerado sobre el duro proceso de dar el pecho a su segunda hija, Banks, nacida en octubre de 2018, durante seis meses y la depresión que le acarreó.
“Estos son una serie de pensamientos sobre la lactancia materna para las mujeres”, empieza escribiendo junto a una foto en su cuenta de Instagram en la que aparece dando el pecho a la pequeña con los ojos llorosos. “Esta ha sido mi última semana dando el pecho, he llegado a los seis meses”, añade en la instantánea, que supera un millón de me gusta en un día.
“Soy madre de dos hijos. Mi objetivo era llegar a los seis meses dándole el pecho a mi pequeña y, entonces, decidí si seguíamos o no”, detalla. “Sacarse leche en el trabajo es una mierda. Tenía poquísimo tiempo en el trabajo y generalmente lo hago durante las sesiones de peluquería y maquillaje, mientras me preparo para la siguiente escena, todo con muchísima gente alrededor”, detalla.
A pesar de esto, la estadounidense señala que este no es el único motivo de que haya decidido dejarlo: “Incluso si tuviera una habitación propia y lujosa para dar el pecho, necesitaría un descanso”.
La actriz se queja del sonido que hace el sacaleches y, por supuesto, del daño que produce en el pecho. “Se te mete en tu cabeza día y noche (¡te juro que lo he oído alguna vez a las tres de la mañana!). Te están arrancando los malditos pezones”, detalla.
“Luego, tener que encontrar un sitio para esterilizar los biberones y mantener la leche fría. Esto no lo sabía con Luca [su primer hijo] porque no empecé a trabajar hasta que tenía nueve meses, así que no me sacaba tanta leche”, indica.
“Además, el suministro de leche baja cuando dejas de alimentar a tu bebé con tanta frecuencia y pierdes conexión con él. Así que estaba comiendo todo el tiempo”, señala no sin resaltar que ha disfrutado estos seis meses de lactancia a su hija.
“Me sentí tan afortunada de estar cerca de ella y darle ese comienzo porque sé que muchas mujeres no pueden hacerlo. Estoy agradecida, pero necesitaba un descanso. Me iba a morir con el estrés de no tener ni una gota de leche y de tener un bebé que se aburre cuando su madre no está disponible”, detalla. “Estaba triste y frustrada y me sentía como una fracasada todo el tiempo. Como si fuese una mala estrella del rock”.
Duff aprovecha para mandar un mensaje a todas las “supermamás”. “No sé por qué nos quedamos siempre estancadas en la idea de que podemos dar un poco más. Somos tremendamente fuertes, somos unas triunfadoras”, enfatiza. “Es increíble todo lo que podemos hacer en un solo día, tanto mis amigas que son madres, mi madre, o mi hermana. Te lo digo a ti, madre, que estás leyendo esto”, detalla.
“Quise compartir esto porque dejar de dar el pecho fue muy duro y emocional. Lo pienso todo el tiempo todos los días. Está en bucle en mi cabeza. Comparo los pros y los contras y la mitad del tiempo no tiene ningún sentido. Es sobre mí y no sobre Banks”, añade.
“He llorado mucho, he tenido depresión y lo he detestado con todas mis fuerzas. No me sentía yo misma. Algo aterrador flotaba en mi cabeza y mi corazón... Había una parte de mí que pensaba que era inteligente y racional, pero los bajones eran horribles”, enfatiza la intérprete, que achaca estos episodios a los niveles de hormonas.
“Esos químicos son hormonas muy potentes, no es ninguna broma. Estoy feliz de decir que no he dado de comer a mi hija en tres días y te acostumbras rápidamente”, confiesa. “Estoy bien y con confianza, me siento estúpida por haberme estresado tantísimo. Banks tiene más tiempo para estar con su madre y su padre le alimenta más veces. Y su madre puede dormir un poco más”, detalla.
La actriz acaba su alegato con un llamamiento a todas las madres trabajadoras. “Eres una superheroína por todo lo que haces. Siempre dándolo todo hasta el último minuto. Os quiero a todas y espero que os anime a luchar”, concluye.