García-Gallardo traga saliva por una pregunta: mira los papeles y tiene que admitir lo evidente
"Yo es que no sé mucho de embarazos".
El vicepresidente de la Junta de Castilla y León, Juan García-Gallardo, ha sufrido uno de esos momentos ‘tierra, trágame’ al tratar de responder a una pregunta durante una rueda de prensa en la que ha presentado medidas para desincentivar el aborto.
Gallardo ha anunciado que en la región se dará la oportunidad a las mujeres que quieran abortar de escuchar el latido del feto o realizar una ecografías 4D.
En esa rueda de prensa, una periodista le ha planteado: “La ecografía de 4D, ¿en qué semana sería?”.
El político de Vox ha guardado silencio durante unos eternos segundos mientras miraba sus papales y, finalmente, ha acabado diciendo: “Puesss... ese dato no lo tengo, pero estoy seguro de que... que pronto lo podemos... aclarar”.
“Yo es que no sé mucho de embarazos”, ha rematado antes de añadir: “En la nota de prensa lo que viene es que es una técnica ecográfica complementaria y no sustitutiva de los estudios ecográficos realizados”.
Mientras, y en medio de la polémica, el líder de Vox, Santiago Abascal, ha respaldado este viernes las medidas ‘provida’ anunciadas por Gallardo, y ha avisado de que su formación política se mantendrá “firme” en su defensa.
“Lo que nos sorprende es que haya gente que en un drama como el aborto no quiera dar información, asistencia y alternativa a las mujeres. Nosotros nos vamos a mantener firmes”, ha sostenido.
Según ha explicado, el objetivo no es “obligar” a los médicos a ninguna actuación, sino “dar el derecho a las madres de poder escuchar el latido de la vida que llevan dentro”.
Con ello, ha evitado ahondar en la diferencia de posturas entre el PP y Vox y ha apuntado que “lo resolverá” su vicepresidente en Castilla y León. “No voy a añadir ningún debate más que pueda complicar la buena relación entre el PP y Vox en Castilla y León”, ha zanjado.
Este viernes, el portavoz del comité de campaña del PP, Borja Sémper, ha avisado a Vox de que su formación no va a “tragar con cualquier cosa” y que expresará su rechazo con las medidas con las que no está de acuerdo y se quieran “imponer”. A su entender, son “perfectamente compatible las políticas de fomento de la natalidad con una política clara de respeto a la libertad de la mujer”.