Gabilondo desvela "lo más positivo" que tiene el Gobierno de Sánchez
El periodista pone el foco en que el mayor reto del nuevo Ejecutivo, "su mayor riesgo", es "la gestión del conflicto catalán"
El periodista Iñaki Gabilondo ha resaltado este lunes -en su comentario Demasiado peso para un hilo tan fino, en la Cadena Ser- “lo más positivo” que, a su juicio, atesora el nuevo gobierno presidido por el socialista Pedro Sánchez.
“A mi juicio lo más positivo de este Gobierno junto a su compromiso social es el empeño ambicioso y firme por afrontar los grandes desafíos del futuro”, ha destacado Gabilondo.
En este punto, el periodista ha matizado que estos retos son:
- La transición ecológica.
- La agenda 2030.
- La transformación digital.
“Ya no figuran como asignaturas ‘marías’ sino como objetivo preferente encomendado directamente a las vicepresidencias”, ha concretado Gabilondo.
No obstante, para el periodista el mayor reto del nuevo Ejecutivo, “su mayor riesgo”, sigue estando en “la gestión del conflicto catalán y por tanto de la muy delicada relación con Esquerra al que aprieta un Puigdemont que hoy hace su entrada triunfal en Estrasburgo. Esquerra es el hilo del que pende la legislatura”.
“Demasiado peso para un hilo tan fino”, ha sentenciado.
Demasiado peso para un hilo tan fino
Una vez cerrado el equipo de Gobierno, el torrente de juicios y prejuicios de las últimas semanas puede matizarse bastante.
Se esperaba un Gobierno radicalizado por Unidas Podemos y ahora se dibuja un Gobierno moderadamente socialdemócrata con Unidas Podemos bajo control. Se duda menos de la disciplina presupuestaria.
La ortodoxia europeísta parece a salvo. Ahora se trata de ver si esa disciplina diluye las políticas sociales. Sigue preocupando, aunque algo menos, la posible descoordinación de los ministros del PSOE con Unidas Podemos.
Ahora preocupa la coordinación entre ministerios, dejando al lado si son socialistas o morados por solapamiento de atribuciones y responsabilidades.
Hay mucha tarea repartida o compartida con enunciado similares y fronteras difusas. Hemos pasado de los gobiernos regidos por los abogados del Estado en la época Soraya Sáenz de Santamaría al gobierno regido por economista. Este Gobierno es como un bolso grande de señora: se puede encontrar de todo. Desde debutantes absolutos en la gestión pública hasta ministros encajados en su ministerios con calzador, pero predominan las personalidades con grandes currículums fogeados internacionalmente, muchos de ellos políglotas, incluso algún solista eminente que sospecho no va a ser sencillo encajar en la armonía orquestal.
A mi juicio lo más positivo de este Gobierno junto a su compromiso social es el empeño ambicioso y firme por afrontar los grandes desafíos del futuro. La transición ecológica, la agenda 2030, la transformación digital no figuran como asignaturas ‘marías’ sino como objetivo preferente encomendado directamente a las vicepresidencias. Está en la definición misma de sus cargos.
El mayor reto del Gobierno, su mayor riesgo, sigue estando en la gestión del conflicto catalán y por tanto de la muy delicada relación con Esquerra al que aprieta un Puigdemont que hoy hace su entrada triunfal en Estrasburgo. Esquerra es el hilo del que pende la legislatura. Demasiado peso para un hilo tan fino.