El rey evita en su discurso menciones a Cataluña en el tenso día de huelga general
Se centra en el mensaje a su hija y el "compromiso con los españoles".
Todos atentos a la palabras del rey. La entrega de los premios Princesa de Asturias se ha desarrollado este año en un complicadísimo momento institucional con miles de personas en las calles en Cataluña y tras varias noches con actos violentos como protesta a la sentencia del procés.
Por todo ello, se podía esperar que Felipe VI mandara algún mensaje ante esta situación. Pero su discurso se ha centrado especialmente en la ‘transición’ hacia su primogénita, la princesa Leonor, que ha acudido por primera vez a la entrega de los galardones en el Teatro Campoamor de Oviedo.
El rey ha evitado hacer menciones específicas a los episodios políticos que se está sucediendo en nuestro país, ni Cataluña ni la sentencia sobre el procés conocida el lunes ni la repetición electoral del próximo 10 de noviembre. Tampoco se ha referido a acontecimientos internacionales como la situación del Brexit.
Sí ha lanzado algunas píldoras en sentido más generalista. Ha dicho al inicio que estos premios son, “sobre todo, un homenaje y tributo a la ejemplaridad”. Y se ha referido especialmente a los jóvenes: “Tenemos el deber de proporcionarles las herramientas que les ayuden a enfrentarse a los retos y dificultades de su vida”.
Las palabras las pronunciaba mientras a la vez en Barcelona a esa hora había enfrentamientos y violentos quemaban contenedores y prendían fuego en las calles de la capital catalana.
“Compromiso con los españoles”
En unas palabras a su hija como heredera le ha dicho que su “compromiso con los españoles” deberá renovarlo “permanentemente con dedicación, espíritu de servicio, lealtad y responsabilidad; siempre con humildad, y consciente de tu posición institucional, haciendo de la Corona día a día una referencia de servicio a nuestro país, porque eso es de lo que de ella esperan nuestros ciudadanos”.
“La obligación de servir a España y a los españoles debe ser el mayor orgullo y el máximo honor que puedes alcanzar”, ha indicado Felipe VI, que le ha comentado: “Tu deber será siempre actuar con el ánimo esperanzado, con coraje y con valentía; creciendo en responsabilidad, en bondad y en ejemplaridad”.
Ha aprovechado para dirigirle a sus hijas y a las próximas generaciones un “mensaje de confianza”.
Ha sido diferente, por ejemplo, al discurso de 2017, apenas unas semanas después del referéndum ilegal. Entonces dijo que España “tiene que hacer frente a un inaceptable intento de secesión en una parte de su territorio nacional”.
En el de 2018, coincidiendo con el 40 aniversario de la Constitución, el rey reivindicó el texto como “fruto de la concordia entre españoles, unidos por un profundo deseo de reconciliación y de paz, unidos por la firme voluntad de vivir en democracia”.