Evergrande: la quiebra del gigante inmobiliario chino que puede provocar un crack mundial
Es uno de los mayores promotores inmobiliarios del país, pero su grave problema de liquidez podría impedirle saldar las deudas que tiene con sus acreedores.
Los mercados internacionales están de los nervios, con importantes caídas: casi un 2% en EEUU, un 2,17 en Japón, más de un 3 en Brasil, un 6 en Argentina, 1,2 en España... La culpa es de las noticias de una inminente quiebra de la empresa inmobiliaria china Evergrande, que desataron el pánico y dan lugar a comparaciones con la debacle de Lehman Brothers. Evergrande es una firma china que tiene una deuda de 300.000 millones de dólares. En los últimos días declaró que no podrá afrontarla. Y la crisis ha explotado.
El segundo promotor inmobiliario más grande de China, que supone el 2% del PIB del país, está atravesando una grave crisis de liquidez y no puede responder a sus acreedores por un préstamo que vence el 20 de septiembre, esta semana.
Los analistas financieros coinciden que existe una crisis de liquidez importante, pero que el Gobierno chino tiene margen de maniobra para rescatarla. Es decir, inyectarle la liquidez para afrontar los pagos de su deuda en los próximos días, semanas y meses sin caer en una situación de default. Este jueves le vence una obligación financiera que es cercana a los 80.000 de dólares y hasta fin de año los pagos acumulan 550 millones.
Evergrande forma parte de Global 500, lo que significa que también es una de las empresas más grandes del mundo por ingresos. Fundada en 1996 por Xu Jiayin, esta compañía genera unos 3,8 millones de empleos indirectos y cuenta actualmente con 200.000 trabajadores. En cuanto a sus logros, la compañía destaca en su página web que tiene casi 1.300 proyectos en 280 ciudades y ha vendido casas a 12 millones de propietarios.
Sin embargo, sus intereses van mucho más allá de las viviendas, ya que también opera en los sectores de alimentos, vehículos eléctricos, seguros de vida, audiovisuales, parques temáticos, tecnología y entretenimiento. Además, en 2010 compró el equipo local de Guangzhou, en la región de Guangdou, donde tiene su sede. Desde entonces, el Guangzhou Evergrande, como se llama ahora el club, construyó la escuela de fútbol más grande del mundo. Actualmente, trabaja también en la construcción del estadio de fútbol más grande del planeta, cuyas obras está previsto que terminen el próximo año.
Intentos agónicos
Las grandes deudas que ha acumulado Evergrande a lo largo de la historia no eran ningún secreto, pero durante los últimos años se han disparado a medida que pedía préstamos para financiar sus diversas actividades. Con más de 300.000 millones de dólares en pasivos, la compañía tiene un pago de intereses de bonos de 83,5 millones de dólares (unos 71,2 millones de euros) que vence la próxima semana, según Reuters.
Durante las últimas semanas, advirtió a los inversores sobre sus problemas de liquidez, diciendo que no podría asumir la deuda si no recauda dinero rápidamente. Esa advertencia se evidenció más el pasado martes, cuando Evergrande confesó que le estaba costando encontrar compradores para algunos de sus activos. Aseguró que aún no había logrado “ningún progreso material” y que “no está claro si el grupo podrá consumar dicha venta”.
El sábado, la compañía emitió un comunicado en la red social china WeChat para anunciar que los inversores que quieran que les reembolsen sus productos de gestión patrimonial con bienes materiales pueden contactar a sus asesores de inversiones y elegir entre apartamentos, oficinas, espacios comerciales o aparcamientos a precio reducido como método de reembolso.
Intervención del Gobierno
Uno de lo mayores temores que despierta la posible quiebra de Evergrande es que se produzca un ‘efecto dominó’ que afecte a todo el país, pues obligaría a los acreedores a asumir los costos y arruinaría a cientos de empresas. Por ello, los analistas confían en que el Gobierno chino intervenga para minimizar este impacto nacional. Por su parte, Mark Williams, economista jefe de Capital Economics para Asia, vaticina en declaraciones a la CNN que el banco central de China “intervendría con apoyo de liquidez” si se intensificaran los temores de un incumplimiento importante.