Elon Musk se sale con la suya y se hace con Twitter por 44.000 millones de dólares
Después de varias semanas de negociaciones y pese al rechazo inicial de la compañía.
Tirando de billetera. Elon Musk se ha salido con la suya y ha acordado la compra de Twitter por un total de 43.394 millones de dólares (40.495 millones de euros)
La noticia, que se esperaba para esta noche hora española (tarde en EEUU) ya había impulsado de forma notable la cotización de la red social. En la sesión de este lunes, Twitter ha subido hasta un 7%. Sin embargo, tras el acuerdo, la propia compañía ha anunciado que dejará de cotizar en Bolsa.
No ha sido una operación sencilla. “El hombre más rico del mundo” ha tenido que superar desencuentros más allá del montante de la operación. Twitter mostraba sus recelos, algo que llevó al propio Musk a plantearse una OPA para vencer a los “bots de spam” contrarios a esta operación. Desde la empresa se consideraba que esa ‘oferta’, era, en realidad, una “OPA hostil’ a la que había que bloquear mediante la técnica de la ‘píldora envenenada’ (poisoned pill).
Esta, que se llegó a plantear inicialmente, consiste en una serie de derechos especiales concedidos a algunos accionistas que les permiten, ante una oferta de adquisición hostil para obtener nuevas acciones sin coste o con un gran descuento.
Pero eso es agua pasada. “El consejo de Twitter llevó a cabo un proceso amplio y pormenorizado para valorar la propuesta de Elon con un foco deliberado en el valor, la certidumbre y la financiación. La transacción propuesta logrará una prima en efecto sustancial y creemos que es el mejor camino para los accionistas de Twitter”, ha subrayado este lunes el presidente independiente del consejo, Bret Taylor.
La decisión final ha llegado con la unanimidad de la junta directiva de la red social del ‘pajarito azul’. Según la información revelada por la misma, se espera que el acuerdo llegue a término a lo largo de 2022, una vez se disponga del ok de accionistas y reguladores.
Poco antes de anunciarse la noticia, Musk había publicado un tuit donde ya daba por segura su compra: “Espero que hasta mis peores críticos permanezcan en Twitter, porque eso es lo que significa la libertad de expresión”. Su mensaje, en poco más de tres horas, sumaba más de 136.000 retuits, rozaba el millón de ‘me gusta’ y casi 70.000 comentarios.
Posteriormente, en un comunicado analizando su última jugada comercial, el fundador de Tesla explicaba que “la libertad de expresión es el cimiento de una democracia funcional y Twitter es la plaza digital del pueblo donde los asuntos vitales para el futuro de la humanidad se debaten”.
“También quiero hacer Twitter mejor que nunca al potenciar el producto con nuevas características, convertir los algoritmos en fuente abierta para incrementar la confianza, vencer a los ‘bots’ de ‘spam’, y autentificar a todos los humanos”, ha agregado en su nota.