El Senado aprueba los presupuestos con la venganza del PP al PNV
Las cuentas públicas volverán ahora al Congreso para ratificar los cambios o aprobar el proyecto original.
El pleno del Senado ha aprobado este lunes por la tarde el proyecto de los Presupuestos Generales del Estado para 2018. No se trata del mismo texto que salió del Congreso, sino que se han incorporado 44 enmiendas parciales que incluyen la venganza del PP al PNV por apoyar la moción de censura de Pedro Sánchez contra Mariano Rajoy.
A diferencia de lo que ocurrió el año pasado, los presupuestos no irán directamente al BOE en esta ocasión. La aprobación del texto con variaciones supone que las cuentas públicas tienen que retornar ahora al Congreso para someterse a una nueva votación la última semana de junio. Los diputados pueden tomar dos decisiones: ratificar los cambios del Senado o aprobar el proyecto original que salió del Congreso.
Una vez que las cuentas vuelvan al Congreso, el PSOE deberá buscar apoyos allí entre los grupos parlamentarios para rechazar las enmiendas aprobadas por el PNV y que salgan adelante las cuentas originales.
Tres semanas de tramitación
El trámite en el Senado ha sido rápido, apenas ha durado tres semanas. Las cuentas públicas llegaron al Senado el martes 29 de mayo. La mayoría absoluta del PP rechazó el pasado lunes los cinco vetos generales, con el apoyo del PSOE y las formaciones que apoyaban a Rajoy (Ciudadanos, PNV, Foro Asturias, UPN, CC y NC). Ese mismo día también tumbaron los vetos parciales.
Posteriormente, la comisión de presupuestos del Senado debatió las cuentas públicas y rechazó el pasado jueves incorporar más de 5.400 enmiendas, presentadas por Unidos Podemos, ERC, PDeCAT y Compromís.
Las cuentas incluyen cambios por valor de 175 millones
Únicamente 44 enmiendas fueron aceptadas e incluidas en el proyecto el pasado jueves por esta comisión. Se trata de 17 enmiendas del PP y 27 del Partido Aragonés (PAR), formación que concurrió a las elecciones generales en coalición con los conservadores pero que solo obtuvo representación en la Cámara Alta. Estas modificaciones suponen cambios por un importe aproximado de 175 millones.
De esa cantidad total de 179 millones, 144 millones corresponden a las 27 enmiendas presentadas por el Partido Aragonés para inversiones en Aragón. Una de las más onerosas son 15 millones dedicados a la mejora del tráfico ferroviario de la línea que transcurre entre Huesca y Canfranc.
Los 31 millones restantes se corresponden con las enmiendas con las que el PP ha castigado a los nacionalistas vascos. Originalmente, los conservadores no pretendían enmendar sus propias cuentas pero cambiaron de criterio tras la decisión del PNV de dejar caer a Rajoy al apoyar la moción de censura.
La enmienda de mayor cuantía y la más perjudicial para Euskadi es la retirada de una dotación por valor de 26,6 millones de euros para Lanbide - Servicio Vasco de Empleo. En su lugar, este dinero pretende dedicarse a mejorar el transporte público en zonas despobladas.