El PSOE intenta cerrar un acuerdo con ERC para que haya investidura antes de Nochevieja
Los socialistas, a la espera del congreso de este fin de semana de ERC.
El PSOE y algunos de sus aliados confían en saber este domingo, tras el congreso que ERC celebrará el sábado, si puede o no celebrarse la investidura del socialista Pedro Sánchez antes de Nochevieja, como desea el candidato, han informado fuentes socialistas y de sus socios.
Aunque no está establecido en ninguna norma, es habitual que haya un margen de 48 horas entre la convocatoria de un Pleno y su celebración, para dar tiempo a los diputados para que puedan concertar sus desplazamientos. En este caso, al tratarse de un debate de investidura con una votación tan trascendental, y siendo en fechas navideñas con poca disponibilidad de vuelos o billetes, ese margen aún es más necesario.
Así, el debate de investidura debería convocarse oficialmente el lunes 23, o a más tardar el martes 24, teniendo en cuenta que el Día de Navidad, festivo en toda España, y el 26 de diciembre, festivo en Cataluña y Baleares por San Esteban, quedarían en medio.
Si ése fuera el caso, el debate podría iniciarse el viernes 27, con una primera votación el sábado 28, que resultaría fallida para Sánchez al no conseguir la mayoría absoluta que se requiere, fijada en 176 escaños. Tal y como marca la Constitución, la segunda votación, en la que ya sólo se necesitan más votos a favor que en contra y que Sánchez podría superar con la abstención de ERC, se celebraría 48 horas después, el lunes 30, día en que el líder socialista podría ser investido jefe del Ejecutivo.
Este escenario es el que querría Sánchez porque le permitiría iniciar el año con sus ministros nombrados y poner en marcha cuanto antes el trámite de presentación y aprobación del proyecto de Presupuestos Generales del Estado.
Convocar el debate de investidura en la última semana del año y celebrar la primera votación en sábado significaría que el PSOE tiene bien amarrados los votos necesarios para que prospere la votación, ya que si la candidatura de Sánchez fuera rechazada y resultaran inevitables unas terceras elecciones, la jornada electoral ya no caería en domingo, sino en un día entre semana a mediados de abril.
Esto es así porque desde la primera votación de un debate de investidura comienza a correr el plazo tope de dos meses que fija la Constitución y, si en ese periodo nadie logra ser elegido, se produciría la disolución automática de las Cortes y la convocatoria de las elecciones 47 días después.
ERC no tiene prisa
Pero las prisas de Sánchez por ser investido no se comparten en ERC, a juzgar por las declaraciones públicas que los dirigentes de este partido han hecho hasta la fecha. Su portavoz y secretaria general adjunta, Marta Vilalta, era clara el 9 de diciembre pasado: “Vemos muy lejos que pueda ser antes de Navidad y antes de Fin de Año, básicamente por los días que quedan y porque hay cuestiones que tienen que pasar y que influyen. Nosotros no tenemos prisa”.
Y no hay constancia de que ERC se haya movido de esta posición. Entre esas cosas que tendrían que pasar antes de que los republicanos tomen una decisión al respecto está la sentencia del Tribunal de Justicia de la UE, que se conocerá este jueves, sobre el alcance de la inmunidad del presidente de ERC, Oriol Junqueras, por haber sido elegido eurodiputado en las elecciones del 26 de mayo.
Desde ERC ya han avisado de que, en caso de que el fallo del TUE les sea favorable ―porque se reconozca que el Tribunal Supremo violó su inmunidad como parlamentario al no permitirle salir de prisión para acreditarse como eurodiputado― exigirán ‘rectificar’ los posibles derechos vulnerados de su líder.
A esto se añade el congreso de ERC del próximo sábado ―en el que está previsto que mantengan su apuesta por un referéndum pactado y por dialogar con el Estado, sin renunciar a volver a la vía unilateral― y también unos días antes, el clima en el partido de fútbol entre el Barça y el Real Madrid en el Camp Nou de Barcelona. Todo ello, según sugieren desde el PSOE, marcará la decisión que tome ERC.
En cualquier caso, la formación independentista cuenta con el apoyo de sus bases para no bloquear la investidura de Sánchez siempre y cuando el PSOE acepte crear una mesa de negociación en torno al ‘conflicto político’ en Cataluña.
Los socialistas ya han accedido a hablar de ‘conflicto político’ en Cataluña, pero sigue sin concretarse la mesa de diálogo bilateral entre el Gobierno español y el Govern catalán que ERC exige para desbloquear la investidura.