El PP abandona el Gobierno de coalición con Ciudadanos en el Ayuntamiento de Granada
Acusa al regidor de "atrincherarse" en el cargo y asegura que la ciudad no merece a un alcalde "que actúa de espaldas a sus propios concejales".
El presidente del PP de Granada, Francisco Rodríguez, ha anunciado este martes que los seis ediles que conforman actualmente el grupo popular van a renunciar a sus competencias y abandonarán el gobierno municipal de coalición con Ciudadanos que encabeza como alcalde Luis Salvador (Cs). Como explica Radio Granada, el regidor se queda en una delicada situación dado que uno de sus concejales, Manuel Olivares, anunciará también su marcha a lo largo de la mañana. Salvador se queda solo con otros dos ediles, en un gobierno local con tres miembros.
En una rueda de prensa junto a los ediles del grupo municipal del PP, convocada anoche con urgencia tras el encuentro que mantuvo con Salvador, ha acusado al regidor de “atrincherarse” en el cargo y ha asegurado que una capital como Granada no merece a un alcalde “que actúa de espaldas a sus propios concejales”.
Actualmente Luis Salvador gobierna la ciudad con cuatro de los 27 concejales que conforman la corporación, en virtud del acuerdo que alcanzó al inicio de mandato con el PP -que obtuvo siete concejales en las pasadas elecciones municipales- y Vox -que consiguió tres-. El PSOE fue la lista más votada y obtuvo una representación de diez ediles y Unidas Podemos, tres. Granada es la ciudad más importante que lidera Cs y una de las pocas capitales que cedió el PP a Cs en el 2019.
No sólo está en juego el Gobierno de la ciudad, sino que esta ruptura puede dañar la alianza entre PP (Juanma Moreno) y Cs (Juan Marín) en la Junta de Andalucía, que por ahora sobrevive, tras las mociones de censura -con transfuguismo incluido- en Murcia y Castilla y León. Existe un acuerdo regional de estabilidad en la Junta de Andalucía y resto de instituciones de la comunidad, firmado por las direcciones regionales de PP y Ciudadanos tras la moción de censura en Murcia.
El PP, en esta decisión, cuenta con el apoyo de las direcciones nacional y regional, indica la Cadena SER.
Las causas
El desencadenante de la crisis en el Ayuntamiento fue el anuncio, el 26 de mayo, del hasta entonces concejal del PP y candidato popular en las pasadas elecciones municipales, Sebastián Pérez, de abandonar el partido tras 35 años de militancia para pasarse al grupo no adscrito por el trato “humillante” de su formación.
Pérez acompañó el anuncio de la exigencia de que Salvador abandonara la alcaldía y esta pasara a manos del PP durante los dos años que restan de mandato, con un candidato del Partido Popular acorde a sus posicionamientos y sin descartar la posibilidad de apoyar una moción de censura que daría la alcaldía al PSOE, fuerza más votada en los pasados comicios. Salvador se niega a la rotación aludiendo al pacto que le hizo “alcalde para cuatro años”, según insiste, entre las direcciones nacionales de ambas formaciones.
A pesar del movimiento del PP de abandonar el gobierno local, una hipotética dimisión de Luis Salvador no garantizaría un gobierno de coalición presidido por el popular Luis González. Dando por hecho los votos de Vox, todo dependería del sentido del voto del concejal no adscrito Sebastián Pérez, que ya ha anunciado que solo votaría como alcalde del PP a su amigo Paco Fuentes. El PP le respondió hace unos días que no aceptaría esta condición, que considera un chantaje. Si se diera esta circunstancia, la abstención de Pérez provocaría que fuera investido alcalde el socialista Paco Cuenca.