El poder del 'naming': cómo encontrar el nombre perfecto para una marca
El nombre de una marca debe tener una conexión emocional directa con el consumidor.
Iniciar nuestro camino emprendedor puede ser una tare dura, con muchas decisiones que tomar para que todo funcione de la mejor manera. Trabajar sobre toda la identidad corporativa de una marca es fundamental para conseguir crear recuerdos en el consumidor, pero el nombre será la única forma que tendrá el cliente de dirigirse a nuestra compañía.
Y es que, como sabrás, uno de los factores determinantes a la hora de crear una empresa es su imagen y su publicidad, por lo que un buen naming se vuelve imprescindible para destacar frente a los demás. No solo será la manera en la que te reconozcan, sino que se trata de la primera impresión, junto al logotipo, que los clientes, inversores y otros agentes recibirán de tu proyecto.
Más allá de la identificación que ya hemos mencionado, el nombre de una marca debe tener una conexión emocional directa con el consumidor. Si alguien escucha tu nombre en la radio, en una conversación o lo ve escrito sobre papelería corporativa, debe evocar una serie de valores que sean acordes a los que promulga la propia empresa.
Otro punto importante a tratar es si un nombre debe ser descriptivo, mostrar lo que hacemos. Aunque luego responderemos de manera más extensa a ese aspecto, lo que sí debemos tener claro es que debe evitar cualquier confusión con otras marcas, ya sean del mismo sector o no. No solo por los problemas identificativos que encontraría cualquiera, sino porque podemos entrar en cuestiones legales de difícil resolución.
Existen diferentes procesos para elegir el nombre adecuado para una marca, desde la lluvia de ideas o brainstorming hasta los mapas conceptuales o los acrónimos y siglas. Todos ellos son válidos, pero debemos elegir aquellos que mejor nos guíen hasta conseguir un nombre que de verdad represente todo lo que buscamos.
Os dejamos aquí apenas cinco apuntes que te ayudarán a iniciar tu búsqueda, con la idea de conseguir un naming acertado (casi) en cualquier situación:
No te vayas por las ramas
‘Keep it simple’, que dirían los ingleses. Si en publicidad esto es una máxima casi obligatoria, en el proceso de búsqueda de un nombre todavía más. Si intentas hacer piruetas a base de palabras raras, acrónimos ilegibles u otras ocurrencias; acabarás haciendo un lío al propio cliente. Que sea sencillo, tanto para leer como para recordar y asociar a aquello que vendes.
Que sea atractivo y pegadizo
Siguiendo la estela del punto anterior, trata de agregarle algo de chispa y ocurrencia al nombre si quieres que te recuerden. “Aluminios del Sur” es bastante asociable a tu actividad, pero quizás no es especialmente atractivo. Si consigues que las mentes de los consumidores recuerden tu nombre de manera perfecta, terminarás de la misma forma que Kleenex, siendo utilizado como reemplazo del sustantivo original.
Evoca tus valores principales
Como hemos comentado antes, trata de aprovechar estas pocas letras que tienes a tu disposición para mostrar al público cómo es tu marca. ¿Quieres destacar el aspecto tecnológico? ¿O las raíces mediterráneas de tu producto? Busca algunas connotaciones positivas y lo que quieres llegar a representar, y que se pueda leer en tu nombre.
¿Debo ser muy descriptivo?
Aquí entramos en terreno un poco pantanoso. Es importante que tu nombre deba asociarse rápidamente a tu actividad y a tus productos o servicios, pero, ¿a qué precio? Con el ejemplo de antes, “Aluminios del Sur” sería muy descriptivo; pero poco original, cualquier empresa podría llamarse así. Si terminas eligiendo un nombre que no sea fácilmente asociable a tu sector, prueba a ponerle un subtítulo: “UNEDA, aluminios y cierres” por poner sobre la mesa lo primero que se nos ha ocurrido.
¿Y si utilizo mi nombre o mis apellidos?
Johnson & Johnson, Ogilvy & Mather, Emidio Tucci (aunque este último tiene truco)… Hay muchas marcas que han optado por elegir nombres propios como identificativos; pero no suele ser una opción recomendable. Son marcas que son muy antiguas, o quieren inspirar ese tono clásico. Sin embargo, es menos habitual encontrar este tipo de construcciones en las empresas modernas.
Ya sabes, si estás en los primeros momentos de tu proyecto y estás por crear empresa online, tendrás que elegir un nombre con fuerza y significado. No tengas prisa, piénsalo bien y recurre a especialistas en branding si quieres formar una marca que de verdad deje huella.