El exmano derecha de Johnson, sobre la covid: "El Gobierno falló cuando más lo necesitábamos"
Dominic Cummings dice en el Parlamento que se buscó la inmunidad de grupo desde el principio y acusa al primer ministro de falta de liderazgo y de irse de vacaciones.
La bomba ha explotado. Dominic Cummings, el que fuera mano derecha del primer ministro de Reino Unido, Boris Johnson, ha declarado hoy ante dos comisiones parlamentarias -de Sanidad y Cuidado Social y la de Ciencia y Tecnología- que indagan sobre cómo gestionó el gabinete tory la crisis del coronavirus y ha hecho lo esperado: rajar de su antiguo jefe, con el que rompió de mala manera en diciembre pasado. “El Gobierno falló cuando más lo necesitábamos”, ha afirmado, tajante, quien vio desde dentro la toma de todas las decisiones.
Cummings llevaba semanas filtrando detalles de las reuniones de Downing Street, a través de sus redes sociales y de un blog, por lo que la expectación era mucha ante su comparecencia. Una intervención en la que ha puesto al premier en la diana, como máximo responsable de los errores ante una pandemia que deja ya 128.000 fallecidos en el país. A Johnson lo ha acusado de irse de vacaciones dos semanas en febrero del 2020 y ausentarse de los distintos gabinetes de emergencia Cobra, los de seguimiento. También, ha repetido, es culpable por no haberse tomado nunca en serio la amenaza del virus y por haber buscado la inmunidad de grupo por encima de todo.
Poco antes de intervenir, decía en Twitter que Johnson había dejado “desprotegidos a los más vulnerables” y carecía de un plan para los mayores en las residencias, donde murieron más del 40% de las 20.000 víctimas mortales en el momento más crítico de la primera oleada. “Los ministros de alto rango, los altos funcionarios y los asesores de alto nivel como actuamos desastrosamente por debajo de lo que la gente espera durante una crisis como esta”, sostiene. Y remata: “Eramos leones dirigidos por burros. Había grandes expertos, pero el liderazgo fue decepcionante”.
Cummings, que hace un año tuvo que justificar por qué él mismo quebró las restricciones de confinamiento al desplazarse en coche a otra localidad inglesa, se mostró hoy “completamente desconcertado” porque el Gobierno haya negado rotundamente haber contemplado la opción de la inmunidad como estrategia para encarar la crisis, cuando fue su plan.
“No es que nadie pensara que fuera algo bueno y que lo quisiéramos de forma activa -dice sobre la inmunidad-, se veía como algo completamente inevitable y la única pregunta que se formulaba era relativa a cuándo, si bien se logra inmunidad grupal para septiembre (2020) o para enero (2021) después del segundo brote. Esa fue la asunción hasta el 13 de marzo”, recordó. Al final, el primer ministro accedió a un confinamiento tras ser advertido por los científicos de que la estrategia inicial podría haber causado más de 250.000 víctimas mortales.
Desde el Gobierno -agregó- se hicieron varias “asunciones equivocadas en la planificación de la pandemia” con base a ese planteamiento (de que la inmunidad de grupo era inevitable) a comienzos del pasado año.
“En esencia, la lógica del plan oficial desde el ministerio de Sanidad era que la enfermedad se va a propagar, las vacunas no van a ser relevantes de ninguna manera durante el periodo relevante, y nos dijeron que era un certeza que no habría vacunas disponibles en 2020, algo que también resultó ser una completa equivocación”, apuntó.
Demoras y falta de decisión
Los tiempos, también, influyeron en la mala toma de decisiones, añade. “No hubo ningún sentido de urgencia en el gobierno ante la pandemia hasta finales de febrero porque mucha gente clave estaba literalmente esquiando”. “Durante enero, febrero y ppios marzo, Johnson creía que el gran problema no era la pandemia en sí, sino la reacción de los ciudadanos ante las medidas y las consecuencias del confinamiento para economía. Es falso que ministro del Tesoro quisiera atrasar confinamiento”, denuncia.
Así que a principios de marzo de 2020, lo que pasaba le recordaba hasta a una película: “Era como una escena de Independence Day, con Jeff Goldblum diciendo que los extraterrestres están aquí y tú básicamente no tienes un plan”.
El principal asesor de Johnson, el hombre que lo llevó en volandas al éxito por su defensa encendida (y su manipulación mediática) sobre el Brexit, ha entonado también el mea culpa en este caso. “Lamento amargamente no haber recomendado una acción más fuerte hasta alrededor del 11 o 12 de marzo. Pero en ese momento temía que mi plan fuera peor y hubiera sido un gran problema decir esencialmente que el consejo oficial estaba equivocado”, ha dicho.
Eso, antes de dar caña a todos, conservadores y laboristas, en su nueva dinámica en redes de atacar a toda la clase política. “Si en las últimas elecciones generales las dos únicas opciones que tenían los británicos eran figuras como Corbyn o Johnson está claro que el sistema en este país no funciona. Hay otras personas brillantes para el liderazgo”, defiende.
A la luz del testimonio de Cummings, el Partido Laborista ha reclamado la apertura inmediata de una investigación sobre la estrategia ante el Covid, demorada por Boris Johnson hasta el 2022.
Johnson se defiende
Boris Johnson, por su parte, ha tenido la oportunidad de defenderse ante estas acusaciones. Lo ha hecho en la sesión semanal de preguntas al primer ministro en la Cámara de los Comunes, donde ha tratado de “minimizar la pérdida de vidas” al estallar la crisis sanitaria. “La gestión de la pandemia fue una de las cosas más difíciles que este país tuvo que hacer” y “ninguna decisión fue fácil”, respondió el premier al ser interpelado por el líder laborista, Keir Starmer, sobre las críticas de su antiguo asesor y mano derecha.
“Entrar en confinamiento fue algo traumático para este país, lidiar con una pandemia de este nivel ha sido tremendamente difícil y, en todo momento, tratamos de minimizar la pérdida de vidas, salvar vidas, proteger al NHS (Sanidad pública) y seguimos el mejor asesoramiento científico disponible”, añadió Johnson.
El primer ministro ha destacado además el buen ritmo del programa de vacunación contra la covid-19 en el Reino Unido y recordó que el país ya está ofreciendo dosis a los jóvenes mayores de 30 años.