El efecto del Covid: Aena registra pérdidas de 126,8 millones en 2020, las primeras desde 2012
Los ingresos de la compañía se redujeron a la mitad: desde 4.503,3 millones en 2019 hasta 2.242,8 millones en el año pasado.
El gestor aeroportuario Aena perdió en 2020 un total de 126,8 millones de euros, frente a un beneficio neto de 1.442 millones en 2019, según los datos enviados este miércoles a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), que reflejan también un recorte de ingresos a la mitad, hasta 2.242,8 millones de euros. Son las primeras pérdidas desde 2012.
Las limitaciones derivadas de la pandemia de coronavirus redujeron el número de pasajeros en los aeropuertos de la red -incluyendo los de Luton (Reino Unido) y los seis aeródromos del grupo en el nordeste de Brasil- un 70,9 %, hasta 89,3 millones en 2020, con mayores caídas en España (72,4 %) que en Luton (69,6 %) y Brasil (44 %).
Por esa razón, los ingresos de la compañía se redujeron a la mitad: desde 4.503,3 millones en 2019 hasta 2.242,8 millones en 2020. Los derivados de la actividad aeroportuaria bajaron en 1.908 millones (67,1 %) y los comerciales e inmobiliarios lo hicieron en 209 millones (15,9 %).
Aena advierte de que a corto plazo no se observan signos de recuperación en el tráfico debido a la nueva oleada de contagios en Europa y a las medidas restrictivas aplicadas por los diferentes países europeos, por lo que “no es posible anticipar en que momento se iniciará la recuperación”.
El resultado bruto de explotación del grupo (ebitda) cayó un 74,2 %, de los 2.766,2 millones del año precedente hasta 714,6 millones en 2020, con un margen del 31,9 % frente al 61,4 % anterior.
Aena registró contablemente ingresos por las Rentas Mínimas Anuales Garantizadas (RMGA) por 635,5 millones, incluidas las correspondientes al periodo del primer estado de alarma (198,6 millones) puesto que existe un derecho contractual a percibir esas rentas.
Los ingresos evolucionaron de forma positiva en las tiendas duty free, con un aumento de 39 millones (el 11,3 %) y en restauración, con un leve crecimiento del 0,2 %.
La compañía ha definido un plan de ahorro de costes basado en la renegociación de los contratos de servicios operativos, la eliminación de gastos y la paralización de nuevas contrataciones no esenciales, que ha reducido las salidas de caja mensuales en torno a 43 millones de euros. Los ahorros acumulados del periodo abril-diciembre sumaron 404,7 millones.
Ahora la empresa está renegociando los contratos de alquiler de tiendas, servicios de restauración máquinas de vending, servicios financieros en relación con la renta mínima garantizada con fórmulas distintas en función de los periodos de actividad (previo al estado de alarma o posterior) de 2020 y hasta el 8 de septiembre de 2021. A partir de entonces reanudará las condiciones pre-pandemia.
A cierre de 2020 Aena tenía una deuda bruta de 7.682 millones de eeuros, 1.300 millones más que un año antes.
Lo que cobran sus mandos
El presidente del gestor aeroportuario Aena, Maurici Lucena, cobró en 2020 un total de 170.000 euros, sin incluir la revisión salarial del 2 % correspondiente al año, que está pendiente, y el consejo en su conjunto percibió 315.000 euros.
Según el informe de retribuciones enviado a la CNMV, la retribución fija del presidente ejecutivo de Aena fue de 111.709 euros, a la que se suman un complemento de puesto de 44.683 euros y otro variable de 12.505 euros. Estas cantidades están dentro de los porcentajes máximo fijados para el sector público, para el grupo 1, en el que se clasifica Aena, según explica la compañía.
El director general de Aeropuertos, Francisco Javier Marín, -que fue nombrado consejero ejecutivo el 29 de octubre de 2020 y es, junto al presidente, el único consejero ejecutivo- ha percibido desde su nombramiento una retribución fija de 15.780 euros, un complemento de puesto de 3.748 euros y otro variable de 4.490 euros, también pendiente de que se le aplique la revisión salarial de 2020.
El consejo en su conjunto percibió el año pasado 315.000 euros. Los consejeros no ejecutivos cobran una dieta por asistencia a las reuniones del consejo hasta un máximo de 11.994 euros anuales, en cumplimiento de la normativa sobre salarios del sector empresarial público.