El detalle más comentado del Congreso: "Desde lo de Bisbal, no había visto una cobra tan épica"
"La mayor cobra parlamentaria en años", dicen en el PP.
Un detalle de la sesión de control al Gobierno de este miércoles está dando mucho juego en Twitter después de que algunos usuarios de esa red social se percatasen.
La escena tuvo lugar después de la dura respuesta que el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, dedicó al diputado de Vox Ignacio Gil Lázaro, que le reclamó que deje de “hacerse el héroe” al aludir en sus intervenciones a la amenaza de ETA cuando ejercía de juez en el País Vasco y “no fue capaz de resistir la presión”, de ahí que “pusiera tierra de por medio y se vino a Madrid”.
Tras la respuesta de Marlaska, los diputados del PSOE le aplaudieron y dedicaron una larga ovación puestos en pie. Y, justo después, cuando ya se sentaban, la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, ofreció al de Interior su mano en un gesto cómplice.
¿El problema? Que Marlaska no se dio cuenta de lo que pasaba a su lado y no correspondió el gesto, por lo que Sánchez acabó por quitar su brazo en lo que en Twitter han llegado a calificar como la cobra “más épica” desde la de David Bisbal a Chenoa.
“La mayor cobra parlamentaria en años”, ha dicho Alfonso Serrano, diputado del PP en la Asamblea de Madrid.
En su aplaudida respuesta, Marlaska se había negado a pedir perdón a las víctimas de ETA porque, según ha dicho, “no ha dado beneficios” a los presos de la banda terrorista. “No tengo que pedir perdón, este Gobierno no ha dado ningún beneficio a los etarras, ni antes ni ahora, sino que aplica la legislación penitenciaria”, ha sostenido.
Visiblemente molesto, Grande-Marlaska ha llamado “indecente” a Gil Lázaro, que en una nueva interpelación le ha reiterado que debe pedir perdón a las víctimas antes de la manifestación del próximo sábado convocada por la Asociación Víctimas del Terrorismo (AVT) contra el “Gobierno traidor”. ”¿Va a acusarles de ser alborotadores de extrema derecha?”, le ha preguntado, en alusión a las críticas por el paro de transportistas.
“Usted no es el portavoz de las víctimas, es el portavoz de la mentira, del insulto y el odio”, le ha respondido Grande-Marlaska, sin querer hacer ninguna alusión a la AVT y su manifestación de este sábado por los acercamientos de presos de ETA y las alusiones en un informe judicial de la Guardia Civil a contactos entre el entorno etarra e Instituciones Penitenciarias.
Grande-Marlaska ha reprochado a Gil Lázaro que pusiera en cuestión su compromiso como juez en la lucha antiterrorista. “No me vine a Madrid por miedo, me vine a la Audiencia Nacional a luchar en primera línea, como otros jueces, contra la organización terrorista; no a ningún chiringuito”, ha sostenido el ministro, aludiendo también a su marido, que opositó y al que tampoco “le dieron ningún chiringuito”.