El fracaso de Kevin McCarthy y el lío del Partido Republicano bloquean un día más el Congreso de EE.UU.
Los republicanos están trazando nuevas estrategias que permitan encontrar a la persona que ocupe el lugar de la demócrata Nancy Pelosi.
La Cámara de Representantes de Estados Unidos ha aplazado hasta el jueves al mediodía la sesión para renovar la presidencia del órgano. La decisión llega después de que el líder republicano Kevin McCarthy no haya obtenido la mayoría necesaria en seis votaciones.
McCarthy, que ha fracasado a la hora de conseguir los 218 votos necesarios para sustituir a la demócrata Nancy Pelosi, descartó tras la última votación que se produjese una séptima, alegando que todavía no se ha llegado a un acuerdo entre los republicanos más radicales, que mantienen bloqueada la cámara y, por tanto, no pueden tomar posesión de sus asientos.
Ha sido el mismo representante republicano el que ha asegurado que hay avances en las negociaciones entre los legisladores, que se han reunido a puerta cerrada. “Creo que probablemente sea lo mejor: dejar que la gente trabaje un poco más. No creo que el voto de esta noche haga algo diferente, pero creo que el voto en el futuro sí lo hará”, ha explicado McCarthy a los periodistas, en declaraciones recogidas por la CNN.
Los republicanos están intentando trazar nuevas estrategias en la Cámara de Representantes para convencer al grupo de 20 legisladores conservadores que han votado a favor del candidato Byron Donalds y se oponen a la elección de McCarthy. Pese a las negociaciones y el apoyo de su principal aliado, el expresidente Donald Trump, el líder republicano solo ha obtenido 201 votos, mientras que el candidato demócrata Hakeem Jeffries ha obtenido 212 votos.
McCarthy, de 57 años, cuenta con una larga experiencia en el Congreso estadounidense al frente de su partido. En la última legislatura, con mayoría demócrata, ejerció de líder de la minoría, mientras que desde 2011 ha desempeñado el otro rol, el de líder (o líder adjunto) de la mayoría.
El político californiano ya estuvo muy cerca de presidir la Cámara Baja en 2015, pero una retirada inesperada a última hora evitó su nombramiento, que sigue sin llegar aún, evidenciando una división interna que no ayuda para nada a su ‘valedor’ en el intento por volver a la Casa Blanca.
El bloqueo obliga a seguir votando hasta que salga elegido un candidato para dirigir la Cámara de Representantes, que no puede funcionar sin presidente.
El que no ha perdido ocasión de atacar a sus rivales es el actual presidente de EEUU, Joe Biden, que ha calificado como “bochornoso” el retraso en la elección. “El resto del mundo está observando”, ha afirmado Biden, que sin embargo ha evitado valorar las discrepancias internas en sus rivales políticos: “No es mi problema”.