Dia rectifica una de sus medidas estrella: ya no la llevará a cabo
La cadena de supermercados descarta ahora la venta de 1.271 perfumerías Clarel en España y Portugal.
La cadena de supermercados Dia rectifica una de las medidas más importantes del plan de choque anunciado el pasado mes de octubre para intentar capear su delicada situación económica: la venta de las perfumerías Clarel.
La compañía —controlada por el fondo LetterOne Investments, propiedad del magnate ruso Mikhail Fridman— no se deshará de marca filial especializada en el cuidado personal y la cosmética. La cuenta cuenta con 1.271 locales bajo este nombre —1.200 en España y 71 en Portugal—, una red creada con los establecimientos comprados al grupo alemán Schlecker en 2013.
“Grupo Dia cree firmemente en el potencial del sector del cuidado personal y del hogar y en la posibilidad de un exitoso cambio para Clarel. Por ello, ha decidido que la enseña con cerca de 1.300 tiendas en España y Portugal siga formando parte de la compañía”, ha señalado la compañía en un comunicado enviado este viernes a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
La posible venta de las perfumerías era una de las medidas previstas por el anterior equipo de dirección de la cadena, capitaneado por Borja de la Cierva, que ahora rectifica la dirección encabezada por Karl-Heinz Holland, exconsejero de Lidl. “Creemos en un gran futuro para Clarel. Creando una unidad de negocio independiente vamos a darle la oportunidad de desarrollarse como enseña”, asegura Holland en el comunicado.
Otros de los planes previstos por la vieja dirección era el cierre de las tiendas poco rentables, la apuesta por las enseñas de La Plaza de Dia y de Dia&Go y la venta de las tiendas Max Descuento, dedicadas a la venta al por mayor para profesionales.
Los nuevos directivos de la cadena de supermercados han decidido dotar a Clarel de una estructura propia “que trabajará con independencia” y que estará liderada por Paul Berg como consejero delegado.
“Paul Berg cuenta con más de 25 años de experiencia profesional desarrollada principalmente en cadenas de distribución de alimentación y de gran consumo. Tiene un perfil muy internacional y versátil”, señalan desde la cadena.
Un paquete de galletas Tosta Rica de Cuétara (1,85 euros) y otro de galletas Animadas de Hacendado (1,49 euros).
Un paquete de cuatro yogures de limón de Hacendado (0,53 euros) y otro de yogures de limón de Danone (1,09 euros).
Un litro de leche entera de Hacendado (0,59 euros) y otro de Pascual (0,89 euros).
Un envase de detergente para ropa delicada de Perlan (3,50 euros) y uno de Bosque Verde (2,75 euros).
Un litro de caldo casero de Gallina Blanca (1,80 euros) y uno de Hacendado (0,90 euros).
Una tarrina de queso para untar Philadelphia (2,10 euros) y una de Hacendado (1 euro).
Dos tabletas de chocolate Nestlé Extrafino (1,78 euros) y dos de Hacendado (1,17 euros).
Un paquete de salchichas estilo Viena de Hacendado (1,18 euros) y de Oscar Mayer (1,94 euros).
Un tubo de pasta de dientes de Colgate (1,75 euros) y otro de Deliplus (0,95 euros). Ambos envases son de 100 ml.
Un paquete de lochas de queso de El Caserío (1,78 euros) y otro de Hacendado (1,40 euros).
Una lata de Coca-Cola Zero (0,62 euros) y otra de refresco de Cola sin azúcar de Hacendado (0,26 euros).
Un paquete de café mezcla de Marcilla (2,49 euros) y otro de Hacendado (1,19 euros)
Un gel de baño de Natural Honey (0,22 euros/100 ml) y otro gel de baño frutal de Deliplus (0,10 euros/100 ml).
Una bolsa de patatas fritas sabor serrano de Hacendado (0,90 euros) y otra de Ruffles sabor a jamón (1,35 euros).
Un bote de cristal de tomate frito artesanal de Hacendado (1,28 euros) y una lata de tomate frito natural de Hida (1,18 euros). En este caso no es exactamente el mismo producto, sino el más parecido.
