Detenido un trabajador del Hospital de Alcorcón tras intentar asfixiar a una paciente
El hombre, que sufre de esquizofrenia, trató de matar a una mujer de 82 años con una almohada.
La Policía Nacional detuvo el sábado pasado a un trabajador del Hospital Universitario Fundación de Alcorcón (Madrid) después de que intentara matar a una anciana, de 82 años, que se encontraba ingresada en la unidad de Traumatología de ese centro sanitario.
El trabajador, que sufre de esquizofrenia, trató de asfixiar a la paciente con una almohada, pero en ese momento se despertó la compañera de la misma habitación y alertó a las enfermeras y auxiliares, que pudieron evitar el crimen y facilitar su arresto, según han señalado a Efe fuentes policiales.
Según ha avanzado el diario El Mundo, el detenido es J.J.F.G., de 49 años, un empleado de la empresa que se encarga del servicio de lavandería del hospital y que ya mató a dos personas hace 22 años: una en el Hospital Clínico de Madrid y otra en la enfermería de la prisión de Carabanchel, donde estaba preso por el primer asesinato.
Los hechos ocurrieron en torno a las 07.00 horas del sábado pasado, cuando las enfermeras de la planta 2 se sobresaltaron al escuchar los gritos procedentes de una habitación de Traumatología.
Cuando se acercaron a la habitación, las enfermeras vieron al varón de pie, echado sobre la cabeza de la anciana, quien, al verse sorprendido por el personal sanitario, inició su huida por el centro sanitario.
Las enfermeras, que aseguraban conocer al agresor, que este trabajaba en el servicio de lavandería y lencería del hospital, avisaron de inmediato al servicio de Seguridad, quien logró retener al individuo.
Cuando los agentes de la Policía Nacional llegaron al hospital, el agresor había sido trasladado a la sala de Urgencias junto a un compañero de trabajo, donde tuvo que ser atendido de un corte que se había realizado él mismo con un cúter y donde fue valorado por la Unidad de Psiquiatría del Hospital.
Por su parte, la anciana a la que intentó asfixiar ha declarado a la Policía Nacional que estaba despierta cuando el presunto homicida entró en la habitación y que este intentó ahogarla con una almohada, la cual fue requisada por los agentes con restos de sangre de la víctima.
Según ha desvelado El Mundo, el presunto homicida sería J.J.F.G., quien en diciembre de 1997 ya acabó con la vida de otra mujer de 82 años, cuando esta dormía en una habitación del Hospital Clínico de Madrid.
El asesino fue detenido en ese momento e ingresado en la prisión de Carabanchel, donde dos días después de su ingreso mató a un recluso que dormía en la enfermería de la prisión.
Tres años después de las dos muertes, J.J.F.G. fue absuelto por eximente total por trastorno mental y el tribunal ordenó su ingreso en el centro psiquiátrico penitenciario de Alicante, de donde salió en 2007 aunque sometido a un control periódico desde un centro de referencia y medicado.
El hospital lo desconocía
El Hospital de Alcorcón no tenía constancia del historial delictivo y psiquiátrico del detenido este sábado por intentar asfixiar con una almohada a una paciente de 82 años, ya que quien selecciona el personal del servicio de lavandería es la empresa adjudicataria del mismo, en este caso Ilunion.
Así lo han asegurado a Efe fuentes del centro sanitario, mientras que el consejero madrileño de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, ha afirmado que, “a día de hoy”, el Hospital “no ha detectado” que el trabajador detenido haya cometido más intentos de este tipo.
El consejero ha informado de estos detalles después de que se desvelara que el detenido, empleado de la empresa que se encarga del servicio de lavandería del hospital, ya mató a dos personas hace 22 años: una en el madrileño Hospital Clínico y otra en la enfermería de la prisión de Carabanchel, donde estaba preso por el primer asesinato.
Tres años después de las dos muertes, el presunto homicida fue absuelto por eximente total por trastorno mental y el tribunal ordenó su ingreso en el centro psiquiátrico penitenciario de Alicante, de donde salió en 2007, aunque sometido a un control periódico desde un centro de referencia y medicado.
El consejero ha insistido en que, en este caso, la Comunidad “ha actuado correctamente” y “con respeto a la norma, a la ley”, ya que “la labor que realizaba esta persona no condiciona esos antecedentes de penales”, los cuales “se piden para un tipo de profesiones”, aunque no es el caso.
Por su parte, desde Ilunion han rechazado hacer declaraciones a Efe, asegurando que el caso estaba bajo investigación policial y que los datos de los trabajadores son confidenciales.
Por último, el consejero ha querido enviar “un mensaje de apoyo a la familia de la víctima” y, sobre todo, hacer un reconocimiento a “la labor del personal de enfermería”, que “fue fundamental para evitar que el ataque que hizo esta persona hubiese tenido peores consecuencias”.
Después de escuchar los gritos de socorro de la compañera de habitación de la anciana agredida, las enfermeras se acercaron a la habitación, viendo al agresor de pie, echado sobre la cabeza de la anciana, quien, al verse sorprendido por el personal sanitario, inició su huida por el centro sanitario.
Las enfermeras, que aseguraban conocer al agresor al trabajar en el servicio de lavandería y lencería del hospital, avisaron de inmediato al servicio de Seguridad, quien logró retener al individuo hasta la llegada de la Policía Nacional, que se ha hecho cargo de la investigación del caso.