¿Qué se sabe hasta ahora del concierto de Travis Scott en el que murieron ocho personas?
Una avalancha en el evento celebrado en Texas (EEUU) ha puesto en entredicho la actitud del rapero y el dispositivo de seguridad.
Este viernes se vivió uno de los días más negros del mundo de la música. Ocho personas fallecieron tras una avalancha en un concierto del rapero Travis Scott en el festival Astroworld en Houston (Texas, EEUU).
Además de los ocho fallecidos, hubo más de 300 heridos de los cuales 17 personas tuvieron que ser hospitalizadas, 11 de ellas en parada cardiorrespiratoria. Entre los fallecidos había dos menores, de 14 y 16 años, así como dos personas de 21 años, otras dos de 23 y una de 27, además de otro varón que no ha sido identificado, indicaron las autoridades en su rueda de prensa.
Se trata de una de las mayores desgracias en un evento musical de la historia y las autoridades tratan de esclarecer aún qué pudo provocar la avalancha en el concierto al que asistieron unas 50.000 personas.
Según las investigaciones, sobre las 21:15 horas un grupo de asistentes al festival Astroworld —fundado por el propio Travis Scott— empezó a empujar a la multitud hacia el escenario.
La avalancha de gente desató el pánico, provocó peleas entre los asistentes y algunos perdieron el conocimiento, ha explicado el jefe de bomberos de Houston, Sam Peña.
Según Peña, muchos de los asistentes tuvieron que recibir asistencia médica en el mismo lugar de los hechos, donde se levantó un hospital de campaña que atendió a unas 300 personas.
El festival contaba con equipos médicos en el lugar de los hechos; pero, una vez que la avalancha y el pánico comenzaron, se vieron “rápidamente sobrepasados”, ha señalado Peña.
De hecho, según informó The New York Times, la policía ya manifestó su preocupación porque el dispositivo de seguridad fuese insuficiente.
Una de las asistentes al concierto, Madeline Eskins, enfermera de profesión, conversó este sábado con la CNN y describió la experiencia dentro del recinto.
Eskins, que acudió al evento con su novio, explicó que la gente empezó a empujar hacia el escenario en cuanto Scott inició su actuación y enseguida empezó a sentir cómo su cuerpo se comprimía.
“Sentía una presión constante en mi pecho, una presión constante en mi espalda. En un lado, me estaban aplastando. Intenté levantar los brazos para intentar abrirme espacio, pero no funcionaba”, narró. Tras esto, perdió el conocimiento.
Lo siguiente que recuerda es que alguien la agarró, la hizo pasar a través de una valla y la sentó en una silla, donde volvió a perder la consciencia, para despertarse más tarde en una zona diferente y con una botella de agua en su regazo.
Aunque todavía se desconocen las causas del incidente que provocó la avalancha, la Policía ha informado de varias sobredosis de opioides en el recinto y baraja la hipótesis de que alguien intentase inyectar droga a otra persona como inicio de la avalancha.
En una rueda de prensa, el jefe de Policía de Houston, Troy Finner, enfatizó que se trata solo de una teoría que además ha estado circulando por redes sociales y pidió dar tiempo a la investigación para poder averiguar exactamente qué ocurrió.
No obstante, explicó que un oficial de seguridad recibió un “pinchazo” en el cuello cuando intentaba inmovilizar a alguien durante el concierto.
Ese agente perdió el conocimiento y, para recobrarlo, tuvo que recibir un fármaco llamado Naloxona y que sirve para revertir rápidamente una sobredosis de opioides.
Las autoridades locales apenas ofrecieron más detalles, pero ante la insistencia de los periodistas, Peña explicó que el personal médico que estaba en el concierto tuvo que administrar “varias” dosis de Naloxona, pero no dio un número exacto.
El incidente ha puesto en el candelero a Scott, ya que el rapero no detuvo el concierto hasta pasados más de 40 minutos desde que fueron notificados los primeros heridos a las autoridades.
El propio cantante detuvo su actuación durante unos minutos para pedir a los miembros de seguridad que acudieran a ayudar a un hombre que había perdido el conocimiento. “Necesitamos ayuda aquí, alguien ha perdido el conocimiento. No le toquéis, dejadle espacio y que se acerque rápido la seguridad por favor”, pidió desde el escenario.
Sin embargo, que siguiera cantando y no detuviera la actuación mientras sacaban el cuerpo inconsciente de la multitud, desató numerosas críticas. De hecho, han presentado una denuncia contra el rapero por “fomentar comportamientos peligrosos” e “ignorar los riesgos”.
El denunciante, que pide una compensación económica de un millón de dólares (unos 865.000 euros), considera que Scott, así como los promotores del festival y otros involucrados en la organización del evento, “no consiguieron planear y ejecutar el concierto de una manera segura”. “En su lugar, ignoraron de manera consciente los riesgos extremos de daño a los espectadores y, en algunos casos, fomentaron activamente comportamientos peligrosos. Su negligencia ha causado al demandante daños severos”, asegura el escrito, recogido por la cadena CNN.
Tanto Scott como la organización del evento, que canceló los conciertos programados para el sábado, han mandado un mensaje a través de las redes sociales a las familias de los fallecidos.
“Si pudiera distinguir cualquier cosa que estuviera sucediendo, detendría el show y los ayudaría. Estoy devastado y nunca podría imaginar que algo así sucediera. Voy a hacer todo lo que pueda para manteneros informados de lo que está sucediendo”, escribió el rapero en un mensaje en el que aseguró que ayudaría a la Policía a aclarar las circunstancias.
Su pareja, la modelo Kylie Jenner, también lanzó un comunicado en sus stories de Instagram en el que mandó un mensaje de apoyo a las familias y aseguró que desconocían lo que estaba ocurriendo. “Quiero dejar claro no estábamos al tanto de ninguna muerte hasta que la noticia salió después del show. De haberlo sabido, no se habría continuado filmando o actuando”, ha explicado.