¿Cómo puedo vencer mi timidez?

‘¿Cómo puedo vencer mi timidez?’ apareció originalmente en Quora, un lugar para adquirir y compartir conocimiento y entender mejor el mundo.

Respuesta por Raúl Hernández González:

Lo primero creo que es entender que cada uno somos como somos… tenemos unos rasgos, unas preferencias… y está bien que así sea. No suele ser una buena idea estar siempre fustigándose por tener unas determinadas preferencias. Porque además tendemos a compararnos con “el mejor” de los demás (p.j. “ojalá pudiera ser como mi amigo Fulanito, que es el más lanzado del mundo”), y así es fácil salir perdiendo.

Ahora bien, lo importante no son las preferencias, sino los actos y las conductas. Y ahí es donde podemos decidir actuar “a pesar de” nuestras preferencias. Al final lo que importa, lo que los demás ven, lo que provoca cambios en el mundo… es cómo actuamos. Si eso es “natural” para nosotros, o no… es algo que normalmente los demás ni saben ni les importa.

Un elemento importante es saber por qué queremos “superar la timidez”. Pensar bien en qué consecuencias tiene “actuar guiados por la timidez”, y qué consecuencias tendría “actuar sin timidez”. Eso nos puede dar motivación para cambiar nuestro comportamiento.

Actuar en contra de nuestras preferencias suele ser incómodo. Pero “a todo se acostumbra uno”. Por eso es interesante ponerse a prueba para ir acostumbrándose a la incomodidad. Primero en situaciones muy concretas y controladas (sin exigirse demasiado), y luego incrementando poco a poco. Nos daremos cuenta de que, lo que nos agobiaba al principio, nos deja poco a poco de agobiar…

Conviene ensayar rutinas. Por ejemplo, tener dos o tres preguntas/frases estándar para intercambiar con un desconocido cuando te lo presentan. O una “frase de despedida” que puedas utilizar cuando notas que te estás agobiando (“bueno, voy a buscar a mi amigo. Un placer conocerte, hasta otro rato”).

También es interesante ir viendo en qué situaciones uno se siente “más tímido” y en cuáles menos. E intentar evitar las difíciles, y provocar las fáciles. Por ejemplo, si uno es tímido, ir en solitario a una fiesta en la que no conoce a nadie seguro que no es la situación más sencilla. Ir a una fiesta con un amigo seguro que es más aceptable. Ir a una fiesta en la que conoces a casi todo el mundo menos a dos o tres, más sencillo. Ir a una reunión de amigos más pequeña, seguro que mejor que ir a un gran evento. Etc.