¿Cómo buscar un psicólogo 'online' adecuado?
La pandemia del covid-19 ha provocado que cada vez sean más los que opten por este tipo de atención.
Por fin está cambiando la vieja creencia de que al psicólogo solo acuden aquellos con enfermedades mentales. Cada vez son más los que procuran apoyo para gestionar comportamientos, pensamientos o estados emocionales que afectan de manera negativa a nuestro bienestar. Tal vez estés en la tesitura de buscar un psicólogo online o presencial. Si es así, existen una serie de aspectos a tener en cuenta.
La psicoterapia online, o virtual o en línea, está en auge. Aunque su pujanza venía de lejos, la pandemia del covid-19 ha provocado que cada vez sean más los que opten por este tipo de atención.
Personalmente, no creo que todo el mundo deba ir al psicólogo. Es cierto que no sólo está indicado para aquellos que padecen un trastorno mental. Sin embargo, si somos personas relativamente satisfechas, existen formas mucho más productivas de emplear el parné. Al fin y al cabo, acudir a un psicólogo implica sentir un problema que permanece enquistado o que nos desborda, sea objeto de diagnóstico o no.
Desafortunadamente, el desconocimiento general o la falta de implicación de los diferentes estamentos en la regulación de las psicoterapias, pueden hacernos acabar en perfiles poco adecuados.
Parece una perogrullada, pero desafortunadamente no lo es. Son muchos y muchas los que se autodenominan psicoterapeutas que carecen de la titulación necesaria. Es decir, o bien no han pasado por la universidad, o bien no pertenecen al Colegio Oficial de Psicólogos (COP), o no tienen autorización reglada por el Ministerio de Sanidad. La pertenencia al COP y habilitación sanitaria implica que el terapeuta ha cumplido con los requerimientos oficiales en cuanto a formación para llevar a cabo su actividad profesional.
Al igual que un masajista no es un fisioterapeuta, o un naturópata no es un médico, un “terapeuta Gestalt”, o una “coach experta en ansiedad” no son psicólogos. Pueden ser excelentes profesionales; simplemente es necesario saber con certeza qué tipo de servicio estás contratando. Al buscar un psicólogo online, debemos comprobar el número de colegiado/a. Todos los profesionales estamos listados en la página web del COP de tu comunidad autónoma.
Bien, ya has comprobado que tiene la titulación necesaria. Otro aspecto relevante es que cuente con una formación extensa. En la universidad, antes y ahora, el enfoque es puramente académico. La licenciatura anterior o el grado actual no componen formación suficiente para la práctica. Ya sea a través másteres, cursos de experto/a universitario/a o doctorado, el psicoterapeuta debe tener formación específica que lo habilite para el tratamiento.
Además de formación, es conveniente tenga una práctica extensa y relevante. Se trata de un aspecto peliagudo, todo graduado con habilitación debe tener una oportunidad para acceder al trabajo. Sin embargo, un buen psicólogo/a debe tener un espectro de habilidades que no sólo se sustentan en una buena formación; la propia práctica profesional y experiencia vital son aspectos fundamentales.
Aunque busquemos terapia online, siempre es positivo tener la posibilidad de acudir al despacho de manera puntual. Un despacho de psicología debe ser un espacio acogedor y neutro que garantice confort y privacidad.
En el caso de la terapia online, hemos de tener en cuenta tanto el espacio del que disponemos como el que observamos en el psicoterapeuta. Ambas partes deben disponer de tecnología adecuada y un lugar que ofrezca comodidad y privacidad para el desarrollo de las sesiones.
En psicoterapia los atajos te llevan a la casilla de salida. Las terapias milagro simplemente no existen. El lenguaje del terapeuta no debe ser similar al de gurús o pitonisas. Nada en contra de los preceptos espirituales, pero no debe ser tu psicoterapeuta quien los prescriba.
Las promesas de felicidad, pareja o promoción laboral, no caben en un proceso de psicoterapia. Sí cabe la exploración y análisis de tu problemática y la búsqueda de herramientas para su mejor gestión o solución. No existen recetas universales y el proceso requerirá implicación y esfuerzo.
Es muy común recibir pacientes con cuadros sintomáticos específicos que han pasado por terapeutas que no han ofrecido tratamientos validados y eficaces para sus problemáticas concretas. Sin embargo, sí han sido orientados para hablar con una silla vacía, han hecho una constelación con sus familiares o explicado sus últimos sueños.
Aunque es cierto que cada vez más somos los que tenemos una perspectiva integradora, es importante que el psicólogo/a tenga una orientación clara y trabaje bajo enfoques eficaces y validados.
La terapia online está mostrando una eficacia similar a la terapia presencial en muchos supuestos. Sin embargo, no es apta para todos los casos. Existen una serie de líneas rojas, la principal refiere el riesgo clínico ante la ideación suicida y/o comportamiento autolesivo. También debe descartarse su utilización en caso de trastorno mental grave. Otro aspecto importante a tener en cuenta es la edad del paciente; la terapia online no es adecuada para atención infantojuvenil.
La psicoterapia online ofrece una oportunidad a aquellas personas que requieren una atención especializada y que no está disponible en su zona de residencia. No todo vale y no todos los psicólogos estamos capacitados para todo. El tratamiento para problemáticas concretas requiere especialización y enfoques terapéuticos específicos. No todos estamos especializados en todas las patologías y tipos de psicoterapia.
Una buena forma de valorar el perfil del psicólogo o psicóloga es a través de su página web. Generalmente, los equipos multidisciplinares de psicólogos ofrecen perfiles específicos para cada intervención. Es algo a tener en cuenta.
Las primeras sesiones deben estar orientadas a la valoración y ésta debe ser bidireccional. El psicólogo o psicóloga debe ofrecer un análisis preliminar de la problemática y hacer una propuesta de tratamiento que contemple objetivos, metodología y frecuencia de las sesiones. El paciente debe evaluar si la propuesta se adecua a su demanda.
Un psicólogo online debe regirse por los mismos criterios de profesionalidad y confidencialidad que uno presencial, y el proceso psicoterapéutico debe estructurarse de una forma similar, se diseña de manera individualizada y la persona que acude a terapia debe ser parte activa en el mismo.
La alianza terapéutica es clave. Si tras varias sesiones no hay conexión, busca otro psicoterapeuta. Cada profesional tiene su propio estilo; y no tiene por qué impostar una actitud rígida y distante o cercana y amigable. Sin embargo, no debemos olvidar que un psicólogo no es un amigo ni un confidente. No debe extenderse en sus propias batallitas, ni ponerse como ejemplo, ni distribuir consejos a diestro y siniestro, tampoco debe interesarse por aspectos sin relevancia clínica o mandarte besos tras la primera consulta. La relación terapéutica debe ser equilibrada, ofrecer confianza y el psicólogo debe actuar como guía de un proceso de cambio dirigido hacia tu bienestar.