Comienza la recta final de la campaña electoral francesa sin un claro favorito
La abstención puede perjudicar a los partidos tradicionales.
La campaña electoral francesa entra este lunes en su última semana con cuatro de los once candidatos con posibilidades de victoria en la primera ronda, que se celebra el domingo 23 de abril, pero sin un claro favorito.
Los últimos sondeos muestran una situación inédita en la que esos cuatro se sitúan dentro del margen de error: el socioliberal Emmanuel Macron y la ultraderechista Marine Le Pen, empatados con el 22% de las intenciones de voto; el izquierdista Jean-Luc Mélenchon, con el 20%, y el conservador François Fillon, con el 19%.
El socialista Benoît Hamon queda fuera de la foto final, con un 7,5%, penalizado por la fuga de los votos de la izquierda hacia Mélenchon o Macron.
"Sé que estaré en la segunda vuelta", ha dicho Fillon en una entrevista en el semanario Le Journal du Dimanche (JDD), en la que cree que su imputación por falsificación y malversación de fondos no ha minado su "autoridad moral" para ejercer la jefatura del Estado.
Igual de confiado se ha mostrado en Le Parisien Mélenchon: "Cuando me presento a unas elecciones es para ganarlas", señaló un aspirante cuyo auge en los últimos días ha provocado las primeras especulaciones sobre una hipotética segunda vuelta el 7 de mayo entre él y Le Pen.
En ese duelo, y en el que la enfrentará a cualquiera de los otros principales candidatos, la líder del Frente Nacional (FN) saldría derrotada, de cumplirse las proyecciones lanzadas por los institutos demoscópicos.
Por eso, a siete días de la primera ronda, la campaña centró su foco en los indecisos y en intentar reducir la abstención, en un momento en que solo el 66% de franceses tiene claro que irán a votar.
En un mensaje colgado en Facebook, Fillon ha pedido a los ciudadanos que se movilicen "con todas sus fuerzas" y les instó a no dar por sentado el resultado: "La victoria está a nuestro alcance", señaló confiado.
Sendos mítines de Macron y de Le Pen en París y otro de Fillon en Niza engrasarán este lunes la maquinaria electoral, que multiplicará los encuentros públicos en los días siguientes en ciudades como Toulouse, Nantes o Marsella.
La líder ultraderechista dejó clara ayer la consigna a sus militantes: "Convencer a un indeciso o coger de la mano a un abstencionista" para conseguir llegar claramente en cabeza el próximo domingo.
El JDD ha publicado este domingo que la dinámica en favor del FN se nutre principalmente de población masculina, jóvenes de menos de 35 años y obreros, así como que un 60 % de quienes le respaldan lo hacen más por rechazo a otros partidos que por adhesión a sus ideas.
En este último tramo electoral, la líder de la extrema derecha ha recurrido a uno de sus temas predilectos, la inmigración, con críticas a rivales como Mélenchon por querer "hacer entrar a todo el mundo en Francia".
El representante de "La Francia Insumisa", por su parte, intenta frenar los miedos agitados en su contra por su propuesta de instaurar "una política de codesarrollo con América Latina y el Caribe" uniéndose al ALBA (Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América). "Queremos un proyecto de cooperación y no militar o comercial", ha apuntado el domingo en un mitin multitudinario en Toulouse.
François Hollande, que apenas se ha pronunciado en esta campaña y mantiene su puesto de presidente más impopular de la V República, criticó hoy por simplistas algunas de sus propuestas, y lamentó que los sucesivos escándalos de las últimas semanas no hayan permitido debatir a fondo sobre los programas.
El último llega con las sospechas de fraude en esos comicios, después de que se destapara que algunos electores han recibido por duplicado su convocatoria de voto, y se suma a las amenazas recibidas contra los principales candidatos.
En pleno estado de emergencia en Francia, 50.000 policías y gendarmes, junto a miembros de la operación antiterrorista Sentinelle, del Ejército francés (desplegada tras la oleada de atentados sufridos en Francia en los últimos años), serán desplegados para evitar incidentes en estos comicios, para los que se habilitarán 67.000 colegios electorales.