Cinco cosas que aún puedes hacer para ahorrar en la próxima declaración de la renta
Todavía estás a tiempo de actuar.
Queda menos de un mes para que termine el año pero todavía hay tiempo de actuar y pagar menos en la declaración de la renta de 2019, cuya campaña comienza la próxima primavera. Tomar ciertas medidas ahora puede traducirse en un ahorro de 4.300 euros de media, según el sindicato de técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha).
Obviamente, no todos pueden verse beneficiados por igual. Las ventajas fiscales favorecen especialmente a los ciudadanos con mayores ingresos. Los contribuyentes que ganan menos de 21.000 euros anuales —seis de cada 10 españoles— pueden ahorrarse unos 1.600 euros, mientras que esta cifra asciende a los 60.000 euros para aquellos que ingresan más de 600.000 euros, según los cálculos de este sindicato.
Para que sea más fácil de entender vamos a utilizar el ejemplo de Manolo, un trabajador imaginario que cobra 24.000 euros al año. Estas son las cantidades que se puede ahorrar si toma ciertas medidas antes de que acabe 2019:
Somos conscientes de que diciembre es un mes complicado, pero hemos recopilado esas cinco medidas que se pueden llevar a cabo antes de que termine el año para rebajar la factura fiscal, o lo que es lo mismo, el dinero que se paga Hacienda:
Uno de los trucos más conocidos por la mayoría de los ciudadanos es la aportación de dinero a un plan de pensiones para reducir la base imponible del IRPF, la suma de todos los ingresos que logra una persona, sobre la que luego se va a calcular cuánto tiene que pagar.
La aportación que puede hacer al plan de pensiones tiene un límite de 8.000 euros al año. Aquí estarían incluidos tanto los planes de pensiones individuales como los de empleo, que son fondos de pensiones promovidos por una empresa o una administración pública en beneficio de sus trabajadores. Hay aproximadamente dos millones de trabajadores con este tipo de planes, como los empleados de Caixabank, BBVA, Endesa, Telefónica o Bankia.
La cantidad máxima que se va a poder deducir serían esos 8.000 euros o el 30% de los rendimientos del trabajo (sueldo) y de actividades económicas (autónomos) que haya percibido esa persona, la cantidad que sea menor.
Volviendo a nuestro trabajador Manolo, que cobra 24.000 euros al año: si logra aportar esos 8.000 euros de tope a su plan de pensiones (algo que resulta un poco inverosímil), se podría deducir 2.400 euros en la declaración.
Si Manolo aporta 300 euros al mes a su plan (algo más realista), acumulará 3.600 euros a lo largo del año, por lo que ahorraría 1.080 euros.
La aportación de donativos a ONG, entidades sin ánimo de lucro como Aldeas Infantiles o Médicos del Mundo, permite una deducción del 75% por los primeros 150 euros donados. Si se supera ese importe, la cuantía restante permite una deducción por otro 30%.
Hacienda premia la fidelidad. Si un ciudadano ha realizado donativos por el mismo importe o superior al de 2019 durante los dos años anteriores a una misma ONG, ese porcentaje de la cantidad restante sube del 30% al 35%.
Según cálculos de Gestha, Manolo podría llegar a deducirse unos 750 euros si dona a ONGs.
Hacer aportaciones a una empresa de nueva o reciente creación, conocidas popularmente como start-ups, puede suponer una deducción del 30% de las cantidades invertidas durante el año con un máximo de 60.000 euros.
Eso sí, hay que tener en cuenta que esta deducción solo será válida si la inversión de cada ciudadano no supera el 40% del total de la capital de la nueva empresa.
Si Manolo invierte 11.800 euros que tenga ahorrados en una empresa de nueva creación, se puede deducir esos 2.362,80 euros que calcula Gestha.
Aquellos que hayan comprado su vivienda habitual antes del 1 de enero de 2013 y que todavía sigan pagando la hipoteca, se podrán deducir del 15% de las cantidades aportadas durante el año 2019. Existe un límite de 9.040 euros, por lo tanto, la deducción máxima posible sería de 1.356 euros.
Esta deducción por compra de vivienda era muy habitual hasta hace unos años, pero cada vez hay menos personas que pueden acogerse a ella.
Los técnicos de Hacienda calculan que un trabajador que cobre entre 21.000 y 30.000 euros, como Manolo, se puede deducir 727 euros de media por adquisición de vivienda habitual.
Si el contribuyente vive de alquiler, puede beneficiarse de una deducción del 10,05% de las cantidades abonadas por los recibos de alquiler de su casa durante 2019. Al igual que en el caso anterior, existe un límite temporal: el contrato tiene que haberse firmado antes del 1 de enero de 2015.
En el caso de que el contrato sea posterior a 2015, conviene revisar las deducciones a nivel autonómico.
Aunque mucha gente lo desconozca, las cuotas de afiliación a un sindicato y las de pertenencia a los colegios profesionales a los que sea obligatorio inscribirse (abogados, arquitectos...) son deducibles. Así como los gastos de defensa jurídica contra el empleador (si el trabajador tiene que ir a juicio por un conflicto laboral), pueden acogerse a una deducción cuyo límite son 300 euros.
Asimismo, las personas afiliadas a un partido político se pueden deducir el 20% del importe abonado en las cuotas y aportaciones que realicen. El máximo a desgravar en este caso son 600 euros.