Boris Johnson cierra Londres y áreas del sur y el este del país por la propagación de la nueva cepa del coronavirus
"Las navidades no podrán ser como estaban planeadas", ha dicho el primer ministro británico.
El primer ministro británico, Boris Johnson, ha anunciado el cierre de Londres y de áreas del sur y del este del país ante la propagación de la nueva cepa mutada de coronavirus descubierta esta semana en Reino Unido.
“Las navidades no pueden ser como estaban planeadas”, ha anunciado Johnson, que ha decretado el escenario 4 para estas zonas, lo que implica el confinamiento severo para sus ciudadanos, que sólo podrán salir de casa para lo imprescindible: comprar alimentos, medicinas o ir al trabajo si no fuera posible teletrabajar.
De este modo, a partir de esta media noche estas zonas estarán en situación de confinamiento total después de rebasar el total de dos millones de contagiados en las últimas horas, y de la detección a principios de semana de una nueva cepa de contagio acelerado.
“No podemos seguir con las Navidades tal y como lo teníamos planeado”, ha declarado Johnson en rueda de prensa, donde ha anunciado estas medidas “con mucha tristeza”, al explicar la decisión de alterar los planes previstos para la temporada navideña con esta nueva batería de medidas, que en principio se revisarán a finales de año.
El primer ministro británico ha pedido brindar por los familiares a los que no van a ver en estas Navidades “sabiendo que precisamente el hecho de que no estén allí para celebrar la Navidad este año permitirá que puedan estar el año próximo”.
Londres y el sureste del país entran así en el llamado “nivel 4”, uno que cierra efectivamente las zonas afectadas, obliga a los residentes a quedarse en sus domicilios salvo limitadas excepciones, cierra las instalaciones de ocio y servicios no esenciales, e impone el trabajo desde casa salvo circunstancia inapelable, según el primer ministro.
Aunque en principio la duración inicial estipulada es de dos semanas, estas restricciones se revisarán el próximo 30 de diciembre, día en que el Gobierno se pronunciará sobre una posible extensión para salvar, en la medida de lo posible, la última semana navideña.
Asimismo, en lo que al resto del país se refiere, el primer ministro ha reducido significativamente los cinco días navideños en los que tenía previsto flexibilizar las restricciones hasta ahora vigentes, y que ahora se limitará a solo 24 horas.
Sobre la nueva cepa, el principal asesor científico del Gobierno británico, Patrick Vallance, ha querido llamar a la calma al ratificar que no hay pruebas de que la nueva cepa “que es predominante en Londres” sea más letal que la modalidad original, ni altera la respuesta inmunitaria o a las vacunas.
Sin embargo “la transmisión es más rápida”, lo que significa que “hay que limitar todavía más los contactos y reducir su capacidad de propagación”, ha explicado Vallance antes de recordar que la incidencia se ha disparado un 50 por ciento durante las últimas dos semanas en las zonas afectadas por esta nueva restricción.
La responsable técnica de la gestión de la pandemia de la agencia de la OMS, Maria Van Kerkhove, resaltó que la variante ya ha sido analizada por el Grupo de Trabajo de Evolución de Virus. Se trata de una mutación que “ha surgido en el contexto de las variantes de visón identificadas en otros lugares”, explicó este lunes.
En lo que al balance se refiere, el país ha registrado 27.052 casos en las últimas horas y otros 534 fallecimientos, que elevan el total de afectados a más de dos millones de contagiados (2.004.219) y 67.065 fallecidos.