El Real Madrid sobrevive al Chelsea y a la lluvia (1-1)
Una genialidad de Benzema frena el empuje del Chelsea, que pudo sentenciar las semifinales de Champions en los primeros minutos.
El Real Madrid sobrevivió a la lluvia y, sobre todo, a un Chelsea que salió a por todas en la ida de las semifinales de Champions League. El 1-1 podría ser un mal resultado, pero visto el partido, sabe a relativa victoria para los de Zidane. Y pese a la polémica que rodeó al duelo con todas las sombras de la Superliga y las ‘amenazas’ del presidente de la UEFA, pocos se acordaron de todo eso.
El Chelsea, en tromba en los primeros minutos, tumbó a un Madrid que se veía desbordado, especialmente por la zona de Marcelo. Courtois, con un pie milagroso, evitó el gol de Werner en el 10′, pero ya no pudo evitar lo inevitable cinco minutos después. Pulisic, omnipresente sobre todo en la primera parte, se hizo fuerte en el área blanca y batió con un golazo al portero madridista tras regatearle.
Del 0-2 que no fue a la genialidad de Benzema
El Madrid estaba ‘KO’, sin rastro de Modric en el campo y con toda la pinta de que caería el 0-2. Pero es Champions y es el Madrid, que tiró de dos genialidades de Benzema para cambiar las tornas. Primero avisó con un trallazo en el 23′ que acabó en el palo minutos antes de que otra genialidad suya significase el 1-1 en el 30′ merced a una volea imparable tras córner.
De ahí al descanso se igualaron algo las fuerzas, aunque el Chelsea siguió mandando bajo el diluvio que caía a esas alturas sobre el césped de Valdebebas.
Tras el descanso el partido perdió resonancia. El Chelsea siguió dominando, pero sin concretar sus ataques de forma tan peligrosa como en el primer tiempo. A los de Zidane les costó mucho construir juego y apenas pudo llevar peligro en alguna jugada a balón parado. Ni siquiera Hazard, en su enésima reaparición.
Los cambios revitalizaron algo más al Chelsea, que reforzó su control ante un rival que comenzaba a pasarle factura el esfuerzo, sobre todo cuando corría tras el balón ‘inglés’. Asensio por Marcelo y Odriozola por un Carvajal exhausto y menos afilado en ataque de lo habitual fueron las soluciones para el tramo final. Los ‘blues’ no se inmutaron y agarrados a un inconmensurable Kanté controlaron mejor los instantes finales.
Todo por decidir la semana que viene en Inglaterra. En juego, un puesto en la final de la Liga de Campeones.