Cataluña prescinde de 849 rastreadores en plena tercera ola
La Marea Blanca pide a la Generalitat que contrate a los rastreadores formados para hacer el seguimiento de los contactos de los infectados por el coronavirus.
Cataluña afronta la tercera ola de la pandemia del coronavirus con menos rastreadores para detectar los contagios. Los profesionales sanitarios reclaman que el Departament de Salut de la Generalitat garantice la continuidad de los 849 trabajadores que prestaban sus servicios como rastreadores o scouts para Ferrovial y cuyo futuro laboral está en el aire.
El pasado 28 de diciembre, la consellera de Salud, Alba Vergés, anunció la rescisión del contrato con Ferroser, filial de Ferrovial, para hacer el seguimiento de los contactos de la covid a finales de enero. A partir de febrero, la Agencia de Salud Pública de Cataluña ha asumido las funciones de rastreo.
La Agencia de Salud solo ha contratado a unos 200 empleados, mientras que el resto de trabajadores no tiene garantizada su continuidad. Cataluña se encuentra en plena tercera ola de contagios, con 85 fallecidos en las últimas 24 horas. Los hospitales se han visto obligados a reprogramar un 25% de las operaciones quirúrgicas de carácter no urgente ante el aumento de los casos.
Ante la incertidumbre en la que quedan la mayoría de los trabajadores, el sindicato IAC-CATAC convocó una huelga desde el martes 26 de enero hasta el jueves 4 de febrero para exigir que Salut subrogue su contrato con Ferrovial.
Sin embargo, el Departament de Treball impuso unos servicios mínimos del 90%. Unas decenas de trabajadores se han concentrado frente al Instituto Catalán de la Salud.
El Govern concedió durante la primera ola la gestión de los rastreadores a Ferroser por 17,6 millones de euros. Los profesionales sanitarios criticaron esta externalización, ya que consideraban que la atención primaria era la adecuada para ocuparse de esta labor.
Ahora, el Govern ha anunciado la puesta en marcha de un nuevo programa de salud pública, que permitirá la contratación de entre 450 y 750 trabajadores para la labor de rastreo. Sin embargo, solo ha incorporado hasta ahora a unos 200 rastreadores procedentes de Ferrovial.
A finales de diciembre, Ferrovial aseguró que se había puesto a disposición de Salut para facilitar que los más de 800 rastreadores contratados se incorporaran al nuevo servicio de rastreo de la Generalitat. También la Marea Blanca ha pedido que no se mande al paro a centenares de rastreadores “que ya tienen experiencia” en el rastreo.
Curiosamente, el Servicio Catalán de la Salud sí fichó a Max Llobet, que dirigía a los rastreadores de Ferroser hasta diciembre.