Después repitió en varias ocasiones que no pronunciase más el nombre de su mujer. Los asistentes a la gala no supieron muy bien si aquello formaba parte de un sketch o si realmente Smith le había dado un manotazo en la cara a Rock delante de una audiencia potencial de 500 millones de personas.
Fue cuando recogió el Oscar y pidió más o menos perdón por la agresión cuando la industria se dio cuenta de que aquello iba en serio.
El exportero del Real Madrid, Iker Casillas, ha querido pronunciarse sobre lo ocurrido tirando de nostalgia y ha puesto una imagen de la agresión con un entrecomillado de la canción de El Príncipe de Bel-Air, serie que hizo mundialmente famoso a Will Smith.
“Al oeste en Filadelfia,crecía y vivía sin hacer mucho caso a la policía!Jugaba al basket sin cansarme demasiado porque por las noches me sacaba el graduado!Cierto día jugando al basket con amigos unos tipos del barrio me metieron en un lío!Y mi madre me decía una y otra vez”: pic.twitter.com/TJfOpJKBQd