Brad Pitt pasó un año buscando un tesoro enterrado que no existía
El actor aseguró "sentirse bastante tonto al final".
Brad Pitt fue estafado al comprar junto a Angelina Jolie su propiedad en Francia, el Castillo Miraval, tras hacerle creer que había un tesoro enterrado en ella. El intérprete ha asegurado que estuvo un año buscando ese supuesto botín sin éxito antes de darse cuenta de que todo era un engaño.
En su entrevista con motivo del número de agosto de la revista GQ —donde también se sinceró sobre su ansiedad— Pitt ha asegurado que al comprar la propiedad en 2008 —que le costó 60 millones de dólares— le aseguraron que había “millones de dólares en oro” ocultos en la finca por los propietarios medievales de la misma y que estos habían sido “tomados del este durante las cruzadas y enterrados allí”
“Me obsesioné”, ha confesado Pitt, que llegó a adquirir todo un equipo de radares. “Como durante un año, esto era todo en lo que podía pensar, solo la emoción de todo. Tal vez tenga algo que ver con el lugar donde crecí”, ha detallado en referencia a las montañas de Ozark en Missouri donde, según ha contado, “siempre había oro escondido”.
Finalmente, el actor de Érase una vez en Hollywood se quedó con las manos vacías y se hizo público que el vendedor de la finca lo había tomado como inversor en una empresa de radares y le presentó la perspectiva de riquezas no descubiertas para engañarle. Pitt ha admitido en la entrevista que se sintió “bastante tonto al final” y que “fue solo la caza lo que fue emocionante”.
A pesar de que pudiera parecer un burdo engaño, había motivos para creer que existía un tesoro bajo la histórica villa ya que el Château Miraval se encuentra en lo que era una larga ruta comercial romana y contiene estructuras de diversa antigüedad como la capilla del siglo XIII donde se casaron él y Jolie.
El château y su galardonado vino de los viñedos de la propiedad se han convertido desde entonces en una fuente importante de discordia en el divorcio de su expareja.
A principios de junio se conoció que Pitt había denunciado a Jolie por dañar deliberadamente la reputación de su empresa de vinos, Château Miraval, ubicada en el sur de Francia. Esto se debería a que, según Pitt y su equipo legal, Jolie habría vendido su parte de la propiedad por 160 millones de dólares “en secreto”. Esto fue considerado por los abogados de Pitt un movimiento “malvado y vengativo” en el contexto de su divorcio.