Así es el plan del Gobierno para acabar con el paro juvenil
El Ejecutivo quiere reducir el desempleo de los menores de 30 años un 10% en tres años.
El Consejo de Ministros ha aprobado este viernes el Plan de Choque por el Empleo Joven, dotado con 2.000 millones de euros, con el que el Gobierno quiere mejorar la formación y empleabilidad de este colectivo y reducir en un 10% la tasa de paro, hasta el 23,5%, en los próximos tres años.
Según ha explicado hoy la ministra de Trabajo, Magdalena Valerio, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, se trata de un plan que contempla 50 medidas y que persigue atajar la enorme temporalidad de los menores de 30 años y su elevada tasa de desempleo.
La dotación del plan proviene de las cuotas de formación profesional y de los fondos europeos de Garantía Juvenil y se repartirá entre los tres años de vigencia, de forma que 670 millones se emplearán en 2019, 667 millones en 2020 y 663 millones en 2021.
"La situación así lo demanda", ha dejado claro la ministra, ya que hay algo más de 2,7 millones de jóvenes afiliados a la Seguridad Social, el 78% de ellos en sector servicios, y con una tasa de estabilidad del 8,19%, lo que deja clara la "enorme temporalidad".
Asimismo, existen 569.000 desempleados menores de 30 años, de los que 87.000 son de larga duración y el 72 % tiene un bajo nivel formativo, ha dicho la ministra, por lo que entre los objetivos del plan figura reducir la tasa de paro juvenil desde el actual 33%, lo que supone que salgan de las listas 168.000 personas.
Además prevé incrementar la tasa de actividad de los menores de 30 años hasta el 73,5%, reducir un 20 % la brecha de género en esta franja de edad, incrementar cada año un 15 % las contrataciones indefinidas o lograr que 225.000 jóvenes se formen en competencias digitales.
Pero quizás uno de los objetivos más ambiciosos será conseguir que al menos un 43% de las personas inscritas como desempleadas (unas 100.000) sin titulación de enseñanza secundaria obligatoria (ESO) adquieran competencias clave en lengua y matemáticas.
Asimismo, se incluye la adquisición de competencias en lengua extranjera para facilitar la movilidad al exterior, así como un programa de retorno del talento para aquellos que se marcharon y quieren regresar.
La ministra ha resaltado que este plan "ambicioso" es fruto del trabajo participativo y transversal de varios ministerios, de las comunidades autónomas y de la federación de municipios y provincias (FEMP) y que ha sido rubricado por los interlocutores sociales.
En este punto, la ministra ha destacado el acuerdo logrado en la mesa de diálogo social del pasado miércoles con la patronal, que había mostrado su rechazo a firmar el plan, y ha considerado "importantísimo" su apoyo porque son las empresas las que generan empleo y oportunidades laborales.
Entre los principales puntos del plan, la ministra ha hecho hincapié en las medidas destinadas a la orientación, donde se incluye el programa Orientajoven, para crear 3.000 empleos destinados a hacer diagnósticos e itinerarios personalizados de inserción.
También ha destacado la puesta en marcha de programas de formación con compromiso de contratación, así como otras modalidades de formación y empleo, como las escuelas taller, la formación dual o las iniciativas destinadas concretamente a pequeñas y medianas empresas (pymes) y micropymes.
La ministra ha considerado interesante la puesta en marcha de la cadena educativa intergeneracional para impulsar "la conexión entre la generación joven con sus mayores", implementando la figura del mentor, así como el fomento del trabajo autónomo y la economía social, con incubadoras de empresas.
Para Valerio, los jóvenes "no sólo son el futuro sino que son el presente", pero hoy en día tienen un empleo "precario, de baja remuneración", que les impide tener una autonomía personal con "una independencia de sus padres e, incluso, abuelos".
"Hay que remover muchos obstáculos para conseguir una igualdad en el acceso" al empleo, "apostando por la cohesión social", ha dicho la ministra, "para que no tengan tentaciones de apostar por salidas aparentemente fáciles a problemas que son muy complejos", para lograr "más afección al sistema político y público".