Antonio Resines: "Sospecho que muchos de quienes toman las decisiones no han estado enfermos o tienen sanidad privada"
El actor coprotagoniza junto a Miguel Rellán la serie 'Sentimos las molestias', en Movistar+.
Antonio Resines ha hecho este lunes su primera aparición pública profesional tras pasar casi dos meses hospitalizado por coronavirus, desde el mes de diciembre, 36 días de ellos en coma. El actor, al que ya se le ha podido ver en la calle o interviniendo por videollamada en El Hormiguero, ha presentado Sentimos las molestias, la serie que coprotagoniza con el consagrado Miguel Rellán en Movistar+. Seis episodios de, como mucho, 30 minutos que llegarán a la plataforma este 8 de abril.
La ficción cuenta la historia de dos amigos que se dedican a la música —uno es director de orquesta y otro cantante de rock—, pero no aceptan el paso del tiempo y lo que supone envejecer, mucho menos en la industria a la que pertenecen.
Una comedia en la que ambos actores forman un tándem en el que muestran su sincronización y complicidad como protagonistas, y en las que interpretan un papel soberbio que arranca risas sin recurrir a chistes fáciles.
Antes de entrar en materia, y ya que has estado tan atendido [Resines] en un hospital público, me gustaría saber qué opinas de la sanidad pública especialmente en este momento, en el que se ha prescindido de tantos profesionales.
Antonio Resines: Me encanta que me hagas esta pregunta y nos vamos a explayar. No tengo los datos exactos, aunque sí sé, porque me lo dijo el Consejero de la Comunidad de Madrid, que se iban a ampliar los contratos covid. Algunos se han ampliado, otros no lo sé. Todo el tiempo que he estado consciente en el hospital la gran preocupación de la mayoría de los trabajadores era que a los que tenían contrato covid les renovaran hasta junio. Y luego hay un problema gravísimo del que no se habla, que es que la gente está en precario, qué os voy a contar a vosotros.
Nadie tiene contratos fijos, ni gente que lleva 20 años trabajando en un hospital ni gente con un nivel acojonante. A la sanidad pública le hace falta una inyección de dinero y lo hay, y si no lo hay que lo quiten de otros sitios porque es fundamental. Sospecho que mucha gente de quienes toman las decisiones no ha estado enferma nunca o tienen sanidad privada, porque no lo entiendo, ya que si estás enfermo quieres que la gente que te atienda sean los mejores. En España los tenemos.
Lo curioso en España es que hay una carencia de infaestructuras brutal. Es importantísimo que se hagan más cosas, que haya más gente en Atención Primaria, que los ambulatorios funcionen mejor, que funcione mejor el sistema de petición de citas, que los médicos estén más holgados para atender pacientes y que los hospitales no tengan infraestructuras antiguas, que parece que estamos en la Rusia soviética. Llegas ahí y no hay nadie que se quede sin atender, pero por falta de medios hay momentos de colapso. Señores, está muy bien lo de los 20 céntimos de la gasolina, pero pongamos 20 céntimos para la sanidad y que se contrate más gente.
Miguel Rellán: Conozco a gente que lleva 30 años trabajando y no tiene contrato fijo, tienen contratos de tres días, anestesistas. No puede ser, queremos pagar impuestos, pero que vayan ahí. Hay médicos y enfermeros perfectamente cualificados que se van de España y los quieren en toda Europa. No hay voluntad política de inyectar dinero a la sanidad pública, está más claro que el caldo de un asilo, y eso no puede ser. Si no estamos vivos no sirve de nada.
Entrando en Sentimos las molestias. Rellán, ¿se lleva tan mal envejecer como le ocurre a tu personaje?
No, lo de envejecer es inevitable, la alternativa es irte al otro barrio. Lo necesario es envejecer con salud, porque incluso si se tiene 35 años y estás enfermo la hemos fastidiado. Hace falta una vida larga, es la única manera de envejecer, solo hay que ser consciente de las limitaciones. Cuando era joven lo único que era capaz de hacer bien era nadar, y me tiraba desde un trampolín haciendo un tirabuzón y un doble mortal. No tengo necesidad de hacerlo ahora y encima me puedo partir la crisma, no pasa nada. Hay muchas otras cosas y se abren muchísimas otras puertas. Hay que vivir como si se fuera inmortal.
Antonio, ¿los premios están hechos para apartar a las glorias, como se te dice en la serie?
Coño, no creo. No, vamos, los premios son un reconocimiento y siempre han existido. Pero cuando te hacen un homenaje a toda una vida ya te empiezas a mosquear. Pero bueno, estás trabajando toda la vida y está bien que te lo reconozcan.
Rellán: A mí me acaban de dar el del Cine de Cáceres, el de Honor, y la Biznaga de Oro, y digo ‘estoy empezando’. Me dijeron que era por toda mi trayectoria y dije ‘pero qué trayectoria’ y me contestaron: ‘Un momento, que te vamos a dar en la cabeza con el currículum’.
Resines: Trayectoria tenemos, eso sí.