Alemania detecta un aumento del extremismo de derechas durante la pandemia
El ministro de Interior constata que estos grupos se han servido de los movimientos de protesta contra las medidas restrictivas.
La pandemia del coronavirus ha contribuido a fortalecer el extremismo de derechas en Alemania, que ha difundido su ideología a través de Internet y ha capitalizado las protestas contra las medidas restrictivas, según informó este martes el Gobierno alemán.
En una rueda de prensa para presentar el informe anual de la Oficina para la Protección de la Constitución (BfV), el ministro de Interior, Horst Seehofer, señaló que, además de la situación especial derivada de la pandemia, Alemania también se encuentra en una situación especial en materia de seguridad, que constituye un “gran problema”. Los datos reflejan “una clara situación de amenazas diversas” para la sociedad alemana en la que el extremismo de derechas y el antisemitismo se mantiene como el mayor de los peligros, a cuyo aumento ha contribuido adicionalmente la pandemia, señaló.
Se refirió a las manifestaciones en contra de las restricciones para combatir la pandemia, en las que activistas de extrema derecha lograron imprimir su sello y en las que el ciudadano de a pie “con frecuencia no se distanció claramente de los ultraderechistas y de sus posturas”.
Así, los activistas de ultraderecha aumentaron en 2020 hasta los 33.300 –frente a 32.080 en 2019–, de los que alrededor de 13.000 son potencialmente violentos. Los delitos de extrema derecha aumentaron un 5% el año pasado y un 10% los delitos con violencia, que “tocaron un triste fondo” con la matanza racista perpetrada en febrero de 2020 en Hanau (oeste) por un neonazi, que mató a nueve ciudadanos de origen extranjero, asesinó a su madre y finalmente se suicidó.
También el aumento en un 5% de activistas de los Reichsbürger (Ciudadanos del Reich) –movimiento ultraderechista que no reconoce la soberanía de la actual Alemania– es atribuible a las protestas en torno a la pandemia, que aprovecharon para difundir teorías de la conspiración, agregó.
“Los extremistas y terroristas no se confinan. Siguen urdiendo planes contra nuestra democracia. La situación en materia de seguridad en Alemania sigue tensa en prácticamente todos los ámbitos”, declaró por su parte el presidente del BfV, Thomas Haldenwang.
Terrorismo islamista y extremistas de izquierda
En 2020 se registraron 6.632 delitos de la extrema izquierda, un 2,8% más respecto a 2019, lo que supone también un nuevo máximo. El número de activistas de extrema izquierda, que actúan de manera “cada vez más agresiva y desenfrenada”, también creció en 2020, un 2,7%, hasta los 34.300, de los cuales 9.600 son potencialmente violentos.
El terrorismo islamista sigue constituyendo “una amenaza muy seria” tanto para los ciudadanos como para el sistema político, indicó Seehofer, quien señaló que una serie de medidas estatales contribuyó en 2020 a que el número de salafistas se estancara por primera vez, en 12.150.
Según el informe, en 2020 se registraron en total 44.692 delitos con motivación política, el máximo registrado desde la introducción de esta estadística. Los delitos de propaganda constituyen la gran parte de los delitos registrados, aunque disminuyeron en 2020, con 15.275, frente a los 16.182 en 2019. En tanto, los delitos violentos con motivación política aumentaron un 19%, de 2.832 en 2019 a 3.365 en 2020.