Airbus se acerca al 'pelotazo' de las pilas de hidrógeno: "Vamos a una velocidad impresionante"
El gigante de la aviación, junto a la compañía ElringKlinger, desarrolla un motor para alcanzar el 'santo grial' de la industria: el avión de cero emisiones.
La aviación contamina. Solo la emisión del dióxido de carbono que se produce con la combustión de queroseno supone entre el 2 y el 3% de las emisiones de gases invernadero, responsables del calentamiento global, según un informe de la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA, por su sigla en inglés).
De la misma forma que la industria automovilística trabaja en la reducción de emisiones con el desarrollo de motores alternativos y la ciencia, con anuncios como el “logro científico histórico” hacia a una energía inagotable, intentan reducir nuestra dependencia de los combustible fósiles, la industria de la aviación se acerca cada vez más a la producción del avión con cero emisiones.
El gigante Airbus está desarrollando en la actualidad el sistema de propulsión que se considera como una de las soluciones para lograr que la huella ecológica de sus aviones se reduzca al máximo: el motor de pila de combustible de hidrógeno. La multinacional calcula que podría incorporarse a sus aviones a partir de 2035, tal como informa la compañía en su página web.
“Estamos haciendo todo desde cero a una velocidad bastante impresionante”, explica Hauke Peer Lüdders, jefe de sistemas de propulsión de celdas de combustible del proyecto ZEROe, el primer avión cero emisiones del mundo. Precisamente, Airbus pretende iniciar el período de pruebas a mediados de esta década con un A380 MSN1 modificado para transportar tanques de hidrógeno líquido.
Hay dos formas en las que el hidrógeno se puede utilizar como fuente de energía para la propulsión de aviones. Primero a través de la combustión de hidrógeno en una turbina de gas, segundo, mediante el uso de celdas de combustible para convertir el hidrógeno en electricidad para impulsar un motor de hélice.
Debido a que una sola celda de combustible tiene solo unos pocos milímetros de grosor y aproximadamente el tamaño de un sobre de carta, no libera mucha energía. Para lograr niveles de potencia suficientes para su uso en una aeronave, es necesario conectar eléctricamente en serie cientos de estas celdas de combustible para formar una “pila”. Posteriormente, varias de estas pilas se combinan en múltiples “canales” de celdas de combustible.
Con este enfoque, los niveles de megavatios de potencia necesarios para un avión eléctrico funcione son alcanzables. De paso, se logran las cero emisiones de óxido de nitrógeno (NOx), lo que ofrece beneficios adicionales de descarbonización al no producir los conocidos chemtrails,
En octubre de 2020, Airbus creóla empresa Aerostack, una empresa conjunta con ElringKlinger, que tiene más de 20 años de experiencia como proveedor de componentes y sistemas de pilas de combustible. En diciembre de 2020, Airbus presentó su concepto de cápsula que incluía seis sistemas de propulsión de hélice de celda de combustible extraíbles.
“Incluso a medida que avanzan estas pruebas, los equipos también están diseñando y desarrollando la próxima generación de pilas y sistemas de celdas de combustible. Estos serán más compactos y potentes, y darán lugar a una versión que puede volar en el demostrador de pila de combustible ZEROe planificado por Airbus”, explican desde la compañía.
En este contexto, Airbus ha anunciado que trabajará con ArianeGroup, empresa conjunta propiedad a partes iguales de Airbus y Safran, para construir la primera instalación de reabastecimiento de hidrógeno líquido para aviones. La estación estará operativa en 2025 en el aeropuerto de Toulouse.
Asimismo, Airbus también ha anunciado la firma de un acuerdo de asociación con HyPort, una empresa conjunta entre Engie Solutions y la Agencia Regional para la Energía y el Clima de Occitania (AREC), para apoyar el desarrollo de una de las primeras estaciones de producción y distribución de hidrógeno bajo en carbono del mundo en un aeropuerto