7 días de marzo cruciales para aclarar el Brexit
Los parlamentarios del Reino Unido deben decidir cómo y cuándo tendrá lugar el divorcio de Europa, previsto para este 29 de marzo.
Poco menos de tres años después del referéndum sobre la salida de la Unión Europea, los diputados británicos deben decidir en los próximos días cómo y cuándo tendrá lugar el Brexit, inicialmente previsto para el 29 de marzo.
Las conversaciones entre el Reino Unido y UE permanecen estancadas, un día antes de la votación parlamentaria sobre el acuerdo negociado por el Gobierno británico, según citan fuentes oficiales que han hablado con las agencias AFP y EFE.
La primera ministra británica, Theresa May, habló anoche con el presidente de la Comisión Europea (CE), Jean-Claude Juncker, tras un fin de semana de contactos técnicos entre ambas partes, pero queda mucho por hacer. Y con los Comunes amenazando con una nueva derrota a su mandataria.
Este es el calendario crucial de un divorcio que se envenena por momentos.
La primera ministra May podría viajar a Bruselas para finalizar la negociación de garantías por parte de la UE sobre el Tratado de Retirada, con las que intentar convencer a los diputados británicos, que en enero rechazaron estrepitosamente una primera versión del acuerdo.
También las negociaciones entre Londres y Dublín se reanudarán hoy, con seguridad, a fin de conseguir los cambios que busca May sobre la controvertida salvaguarda irlandesa antes de que los diputados voten mañana el acuerdo con eventuales modificaciones.
Estos contactos se desarrollan pocas semanas antes de que el Reino Unido salga de la UE -el 29 de marzo es la fecha-, dos años después de que la jefa del Gobierno comunicase oficialmente al bloque europeo su intención de abandonar el club comunitario.
Es el Día D para el futuro del Brexit. Los diputados votarán la nueva versión del acuerdo. Antes examinarán con lupa el informe legal redactado por el fiscal general Geoffrey Cox, encargado de aconsejar jurídicamente al gobierno, sobre las garantías que May haya obtenido en sus últimas conversaciones con Bruselas.
El Partido Laborista, principal fuerza de oposición en Reino Unido, podría aprovechar para presentar una enmienda que reclame un segundo referéndum sobre la salida de la UE.
Los medios locales destacan que el pacto del Brexit no ha sido modificado sustancialmente y es posible que sea rechazado cuando la Cámara de los Comunes lo vote este martes al término de un debate.
May quiere una garantía vinculante sobre la salvaguarda que evitaría una frontera dura entre las dos Irlandas. Esa cláusula establece que el Reino Unido permanezca en la unión aduanera y que la provincia británica de Irlanda del Norte también esté alineada con ciertas normas del mercado único hasta que se establezca una nueva relación comercial entre ambas partes.
La primera ministra pide garantías de que el Reino Unido no permanecerá atado a las normas del mercado único si Londres y Bruselas no llegan a un acuerdo sobre su futura relación después del Brexit.
Si el pacto de May es aprobado mañana por los Comunes, el Reino Unido se retirará de la UE el 29 de marzo en virtud de los términos establecidos en ese documento.
Si el acuerdo es rechazado la víspera por el Parlamento, May pedirá a los diputados si quieren salir de la UE sin acuerdo, pese a las graves consecuencias económicas y sociales que se atribuyen a esta opción.
Pero si esto tampoco es aceptado, entonces habrá otra votación el jueves sobre si se solicitará un retraso del Brexit.
Si los diputados rechazan un Brexit sin acuerdo, la primera ministra someterá a votación la idea de pedir a la UE un aplazamiento limitado (de pocos meses) de la fecha del Brexit. Hay quien especula, sin embargo, con que se solicitará una "postergación ilimitada", que algunas fuentes de Bruselas sostienen que sólo se puede aceptar si está "claramente justificada".
Los líderes de la UE, Theresa May incluida, se reúnen en una cumbre ordinaria en Bruselas que podría verse dominada por el Brexit. Una semana después, el 29, ocurriría el divorcio.