665 personas muertas y desaparecidas en su intento de llegar a España en patera durante 2019
La ONG Caminando Fronteras hace un balance terrible, aunque puntualiza que las llegadas en patera se han reducido a la mitad
Las cifras son demoledoras: 655 personas murieron o desaparecieron al intentar llegar a España por vía marítima durante 2019, según un informe del colectivo Caminando Fronteras publicado este martes. Esto supone una media casi dos personas (1,79 exactamente) fallecidas cada día.
De las 655 víctimas documentadas por el colectivo, 518 desaparecieron en el mar y solo 137 cadáveres fueron recuperados, por lo que ocho de cada diez víctimas permanecen desaparecidas.
Todos los datos se obtuvieron gracias al monitoreo permanente que Caminando Fronteras realiza en la frontera occidental europea, comprendida en las rutas de Estrecho de Gibraltar, Mar de Alborán, Islas Canarias y la ruta argelina.
Sin embargo, Caminando Fronteras alerta de que “las cifras reales de muertes y desapariciones son bastante superiores a las recogidas por organismos oficiales”, a la luz de las llamadas recibidas en su ‘línea de emergencia’ y de las denuncias de familiares y supervivientes.
De hasta 19 nacionalidades
Las víctimas identificadas pertenecen a 37 naufragios sucedidos durante 2019: diez en el mar de Alborán, dieciséis en el Estrecho de Gibraltar, ocho en la ruta canaria y tres en la argelina. La ruta del mar de Alborán fue la más mortífera, con 246 víctimas, seguida por la de Canarias (228), el Estrecho (146) y la ruta argelina, con al menos 35 personas fallecidas. La gran mayoría de muertos y desaparecidos este año viajaban en 12 embarcaciones que naufragaron sin dejar supervivientes.
Según el informe de Caminando Fronteras, “Ciudadanos y ciudadanas de 19 países de todo el mundo perdieron la vida intentando alcanzar las costas españolas este año. India, Angola, Marruecos, Yemen, Birmania, Bangladesh, Pakistán, Etiopía, Eritrea, Chad, Camerún, República Democrática del Congo, Argelia, Mauritania, Senegal, Gambia, Guinea Conakry, Guinea Bissau y Costa de Marfil eran sus países de origen”. Las mujeres supusieron el 15,87% de todas las víctimas del año (104 fallecidas), mientras que 54 niños y niñas perdieron la vida.
Más muertes, pero menos salidas
Para la activista Helena Maleno, portavoz del colectivo, aunque “desde el Ministerio del Interior español afirman haber reducido las muertes, las cifras de Caminando Fronteras confirman que la mortalidad ha aumentado con respecto a 2018”.
“Las políticas migratorias de la militarización fronteriza y el desmantelamiento de Salvamento Marítimo han reducido en un 50,07% las llegadas de personas migrantes, pero la mortalidad en la zona es incluso mayor”, declaró. “Cerramos otro año con centenares de víctimas en nuestras costas, que son responsabilidad de la necropolítica estatal en las fronteras”, concluye Maleno.