Revés inesperado de los bancos chinos a Rusia

¿Y si la colaboración entre China y Rusia empieza a resentirse? El precario equilibrio que ha pretendido Pekín en estos dos años de guerra en Ucrania está sometido a fuertes tensiones, dado su acercamiento a Moscú y su falta de contundencia ante su invasión del país vecino. Ahora llegan noticias de cambios en lo económico que pueden ir alterando el statu quo.

Un banco chino clave, el Zhejiang Chouzhou Commercial Bank, utilizado por importadores rusos ha detenido todas las transacciones, informó el miércoles el medio ruso Vedomosti especializado en economía, citando a tres empresarios que se vieron afectados. Según este diario, los clientes del banco fueron informados de esta medida la semana pasada.

Las empresas rusas ahora están preocupadas por un "colapso logístico" si el banco no reanuda los pagos después de las vacaciones de una semana del Año Nuevo Chino que comienzan este viernes.

Otros bancos chinos también están endureciendo los controles de cumplimiento cuando tratan con empresas rusas, según el medio de comunicación. El Kremlin ha reconocido los problemas y el portavoz, Dmitry Peskov, dijo esta semana que las autoridades están "trabajando" para abordarlos con el Gobierno comunista. "Mantenemos un estrecho diálogo con nuestros amigos chinos y, por supuesto, resolveremos todos los problemas que surjan", afirmó Peskov en una rueda de prensa, según la agencia AFP.

Los problemas de Rusia con los bancos chinos se produjeron semanas después de que Estados Unidos autorizara en diciembre sanciones secundarias dirigidas a instituciones financieras que ayudan a Rusia a eludir las sanciones, lo que demuestra la eficacia de estas controvertidas restricciones comerciales.

Las empresas rusas que comercian internacionalmente se han vuelto más dependientes de las instituciones chinas y del yuan chino desde que algunos bancos rusos se retiraron del sistema global de mensajería financiera SWIFT.

Dado que Rusia -un importantísimo exportador de energía- ha logrado mantener activa su actividad comercial, su economía todavía parece resistente a pesar de las principales sanciones occidentales por la invasión de Ucrania. Sin embargo, mientras Occidente intensifica las sanciones contra Moscú, incluso las empresas chinas están tratando de no meterse en problemas.

Tras las nuevas restricciones de Estados Unidos en diciembre, al menos dos bancos estatales chinos ordenaron una revisión de sus negocios rusos tras las nuevas restricciones, informó Bloomberg el 16 de enero.

No es la primera vez que los bancos chinos han intensificado el cumplimiento de las sanciones occidentales. En junio, al menos uno de los principales bancos chinos, el Banco de China , comenzó a restringir las transferencias desde Rusia, recuerda a su vez Business Insider.