La fruta preciada de Marruecos sortea las fuertes lluvias del norte del país y sale ilesa

Las fuertes lluvias que han afectado a la península en estas últimas semanas también se han dejado notar en Marruecos. El país africano ha atravesado también una época de inestabilidad que no solo ha afectado a algunas zonas por la virulencia de las precipitaciones, sino que también ha acarreado ciertas consecuencias en algunas plantaciones, que se han visto dañadas como consecuencia.

Según informó el director general de Mavoca, dedicada a la producción de aguacates, Yassin Chaib, se encontraban temerosos de que la borrasca que afectó al reino alauí en estos últimos días, provocara grandes daños a las cosechas, como ya ocurriera con la borrasca Bernard.

"Temíamos que se repitiera la borrasca Bernard, que causó la pérdida del 10% de la producción de aguacate en 2023. Sin embargo, la intensidad de esta nueva borrasca ha resultado mucho menor de lo que habían pronosticado las previsiones meteorológicas. La velocidad del viento no ha superado los 40 km por hora. La descarga de lluvia es abundante, pero eso es una buena noticia para un país sumido en la sequía", afirmó.

En este sentido, y tal y como recoge el portal especializado Freshplaza, Chaib aseguró que "se ha producido cierta caída de frutos que ha afectado a los productores más cercanos a la costa atlántica, en la región de Larache". Pese a ello, se siente aliviado, ya que esta caída "no ha superado el 10% de la fruta que aún estaba en los árboles", y destaca que los lugares afectados "son minúsculos".

Así, destaca que el aguacate marroquí ha conseguido esquivar las fuertes lluvias, y ha conseguido sobrevivir de forma sobrada. Además, afirman que entre el 15% y el 10% de los aguacates del país por el momento no se han cosechado. "Quedan en los árboles entre 15.000 y 20.000 toneladas de aguacates, que representan entre el 15% y el 20% de la producción de esta temporada".

Además, el director de Mavoca augura que "la cosecha se va a acelerar en los próximos días", y señala que actualmente están experimentando "un retraso en la llegada de aguacates de Perú", algo que está provocando un aumento de la demanda y un incremento de los precios, que señala, 2son un 20-30% más altos que al principio de la temporada". Y estiman que la cosecha terminará en "15 o 20 días".

Por otro lado, hay que destacar que este año, el final de la temporada coincidirá con el final del Ramadán, algo que se traducirá de forma evidente en la demanda del mercado marroquí. "Esta temporada tenemos mucho menos hueco de lo habitual, gracias a una mejora general de la calidad".