Investigan a "la mafia del diésel": una estafa que atraviesa Rusia, Marruecos y España

Investigan a "la mafia del diésel": una estafa que atraviesa Rusia, Marruecos y España

La Oficina Nacional de Investigación contra el Fraude pone la lupa sobre un entramado de unos 1.900 millones anuales, según una exclusiva de la 'Cadena SER'.

Imagen de archivo de una persona repostando combustible diésel.Jose Antonio Bernat Bacete via Getty Images

La Oficina Nacional de Investigación del Fraude (ONIF) y las autoridades de competencia han iniciado una investigación sobre la denominada “mafia del diésel” por un fraude estimado en 1.900 millones de euros anuales, que ha estado operando en España durante más de un año. Se trata de una exclusiva que ha desvelado la Cadena SER.

Según el citado medio, la trama comienza con la venta de combustible, principalmente diésel, en países como Siria, Rusia e Irán. Posteriormente, la nacionalidad del combustible se modifica en Turquía y Marruecos para que no aparezca como importado de países con sanciones. Es decir, se simula que el combustible ha sido cargado, refinado y descargado en estos terceros países.

La diferencia de precio al que se vende puede llegar a ser de hasta 60 céntimos menos que el diésel legal, lo que lleva a muchas gasolineras a adquirir este combustible fraudulento, conscientemente o no, a través de una red de operadores “fantasma”.

¿Cómo funciona la trama?: llenar el depósito puede valer hasta 20 euros menos

Estos operadores son el núcleo de la trama. Actúan como intermediarios que venden el producto más barato que el legal, ya que cometen fraude de IVA, biocarburantes y medioambiental, y a precios que incluso amenazan a las gasolineras que compran diésel no fraudulento. Según datos del sector, uno de cada cuatro litros de este combustible pertenece a la trama.

La considerable diferencia entre adquirir diésel legal o fraudulento permite a las gasolineras que venden el segundo ofrecer precios más bajos a los consumidores finales, hasta 60 céntimos por litro menos, lo que puede hacer que llenar el depósito cueste entre 10 y 20 euros menos.

La ONIF ya ha comenzado a enviar requerimientos a estaciones de servicio y operadores sospechosos de beneficiarse de la trama, habiendo enviado unos 400 hasta la fecha. Comprar diésel fraudulento a sabiendas constituye un delito de “receptación”.

Triple fraude: IVA, biocombustible y fondo de eficiencia

La Agencia Tributaria estima que este entramado es uno de los mayores detectados, con 1.900 millones de euros anuales defraudados. Esto es posible gracias a un triple fraude. Primero, el del IVA: estas empresas operan por un corto periodo, compran el diésel, lo venden y luego cierran, sin pagar el 21% del impuesto a Hacienda, lo que representa 1.200 millones de euros.

En segundo lugar, el fraude del biocombustible: al no incluir una cierta cantidad de biocombustible para reducir las emisiones de dióxido de carbono (CO2), el diésel es más barato, aunque más contaminante, lo que supone entre 500 y 600 millones de euros más.

Finalmente, el fraude del fondo de eficiencia: una cantidad que las petroleras deben pagar por la contaminación que generan, pero que las empresas de la trama no abonan, sumando entre 60 y 100 millones de euros adicionales.