Las hipotecas ahogan a las familias: las dos propuestas que podrían aliviar su sufrimiento

Enero de 2022. Una familia española ha adquirido una casa mediante una hipoteca con el banco por valor de 150.000 euros. Lo ha hecho a tipo variable porque, por esas fechas, la media mensual del euríbor —el índice que fija la cuota— era negativo: -0,47. Como el contrato marca que la cuota la determinará el euríbor más el 0,99%, lo que pagan mensualmente ronda los 450 euros. 

Enero de 2023. Esa misma familia, sin haber hecho nada, paga ahora casi 300 euros más. La razón, principalmente, la invasión rusa de Ucrania, que ha disparado la inflación en todo el planeta y que ha obligado a los principales bancos centrales a subir los tipos de interés. El euríbor, en un año, se ha situado en el 3,4%. El sueldo de los miembros de esa familia, muy probablemente, no ha subido acorde a lo que les cuesta ahora de más la casa donde viven. La ruina es total. 

Esta es la situación en la que se encuentran miles de familias en España —y en casi todo el mundo— y que cada vez está ahogando más las economías domésticas, para las que la hipoteca supone, de media, más del 30% de sus ingresos. Del alquiler, ni hablamos. 

Esta semana, tanto el Banco Central Europeo como la Reserva Federal de Estados Unidos han dado una vuelta de tuerca a los tipos de interés. El organismo europeo ha añadido un 0,5%, dejando el precio del dinero en el 3%. El norteamericano también ha subido los tipos un 0,25%. Ahí se sitúa ya entre el 4,5% y el 4,75%. 

Y ambas instituciones avisan de más subidas durante el año. 

A esta situación se ha añadido un elemento que para muchos ha resultado sangrante: los beneficios extraordinarios récord de los bancos españoles con los que cerraron el año 2022. El Santander, 9.605 millones, un 18% más. El BBVA, 6.420 millones, un 38% más. El Sabadell 859 millones, 560 Bankinter... Y así hasta amasar, entre los principales, más de 17.000 millones en lo que se conoce como beneficios 'caídos del cielo'. 

"No es justo", ha expresado en las últimas horas la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, que ha pedido a las entidades financieras que "den un paso adelante y que se comprometan a decirle a sus clientes que van a ponerse de su lado". 

"Son beneficios impúdicos", agregó al día siguiente la ministra de Asuntos Sociales y líder de Podemos, Ione Belarra, que recordó que la banca "no ha devuelto un rescate bancario del que se beneficiaron todos los bancos, de manera directa o indirecta". 

Las dos ministras de Unidas Podemos han planteado en las últimas horas topar el precio de las hipotecas. Aunque la propuesta no es nueva por parte de la formación morada. Yolanda Díaz ya la ha expresado en numerosas ocasiones. 

Como en diciembre, cuando aseguró que cuando el Gobierno actúa sobre los precios, se producen resultados. Y puso el ejemplo de la energía. "Cuando se actúa desde lo público, conseguimos bajar los precios a pesar de que se nos dijo que era ilegal y que no era posible con las normas europeas", remarcó. 

La propuesta que puso entonces sobre la mesa Díaz y que mantiene hoy en día es la congelación de la cuota hipotecaria desde la subida del euríbor con carácter retroactivo. 

Belarra coincidió con Díaz en su propuesta, aunque ella, en un mensaje en Twitter, incidió en actuar sobre las hipotecas variables, las que están viendo incrementadas las cuotas debido al alza del euríbor. 

De momento, según ha informado la Cadena SER citando fuentes del Ministerio de Economía, no hay consenso en este asunto, ya que el departamento de Nadia Calviño no tiene intención de aplicar, por ahora, una medida así. 

La presidenta de la patronal bancaria AEB, Alejandra Kindelán, recordó, tras conocer la propuesta de ambas ministras, que "hace tan solo dos meses" trabajaron "codo con codo con el Gobierno en un acuerdo para ayudar a las familias que puedan tener dificultades con el pago de su préstamo", informa EFE. 

De ese acuerdo, agregó Kindelán, las familias con problemas para afrontar la subida de la cuota hipotecaria pueden acogerse a moratorias, a extensiones de plazos en el pago de sus préstamos y a otras medidas impulsadas por la banca. 

La propuesta de UGT: un fondo de ayuda a hipotecados

Una alternativa que el Gobierno tiene sobre su mesa desde el mes de septiembre es la que le planteó la Unión General de Trabajadores (UGT). 

La propuesta del sindicato, llamada Fondo de protección frente al aumento del coste hipotecario, plantea la creación de un fondo presupuestario del Estado "para ayudar a las personas y hogares que estén pagando una hipoteca y vayan a ver cómo su coste se eleva de manera extraordinaria y excesiva en su próxima renovación como consecuencia del aumento de tipos de referencia establecidos por el Banco Central Europeo". 

El objetivo de la medida, según se lee en el documento presentado en septiembre, es "financiar el sobrecoste derivado de las subidas de los tipos de interés para evitar un endeudamiento excesivo e insostenible de los hogares españoles".

Los beneficiarios de esta propuesta serían, indica UGT, personas con ingresos inferiores al salario medio —que el sindicato sitúa en 1.797 euros brutos mensuales de acuerdo al dato del INE de 2020— y personas o unidad de convivencia en situación de vulnerabilidad social — cuando existan dependientes, jubilados, víctimas de violencia de género o menores de edad a cargo—. Los cálculos del sindicato es que se verían beneficiadas 330.00 familias.

UGT propone que para acceder a esta ayuda, que sería de 12 meses de duración máxima con posibilidad de prórroga y cuya cuantía cubriría el sobrecoste generado en caso de que el euríbor supere los 1,5 puntos, sea necesario acreditar que el importe de la hipoteca supera el 30% de los ingresos de la persona o unidad de convivencia. 

La medida, sin embargo, ha sufrido modificaciones respecto a cuando se presentó hace cuatro meses, ya que desde entonces hasta ahora el euríbor ha escalado del 1,2% al 3,3%. Por ello, el gasto público que calculaban entonces, de unos 650 millones, ahora rondaría los mil millones. 

"Es el momento de ser arriesgado"

Pese a este aumento del coste, Alberto del Pozo, coordinador del Servicio de Estudios del Área Económica de UGT, cree que "sigue siendo una medida razonable" en "este período de ayudas y políticas sociales que ha dado muy buen resultado". Además, cree que el Estado podría financiarlo con los 1.500 millones que, se calcula, recibirán las arcas públicas con el impuesto a los bancos. 

Del Pozo explica que la medida iría dirigida sólo a quienes tienen una hipoteca variable, que según cálculos del sindicato rondaría los 2,8 millones, casi el 70% del total de hipotecas en viviendas principales. "Para las de tipo fijo planteamos otro tipo de instrumentos", indica el experto de UGT, como la renegociación de la hipoteca o ayudas puntuales. 

Desde UGT recuerdan que esta propuesta es una medida "de urgencia" y que debe de ser temporal. Del Pozo recuerda que la clave está en implementar otras medidas paralelas "que se hicieran cargo de para lo que está diseñado el fondo y que no harían necesaria la prórroga del mismo". 

Esa urgencia la explica bien con datos Del Pozo. Según sus cálculos, la cuota hipotecaria en el último año para una hipoteca promedio de 200.000 euros a 25 años ha aumentado en 262 euros al mes. Es decir, 3.140 euros anuales. Todo esto, con la actual inflación, que lo complica todo. "Es imposible para las familias", indica el experto. 

Por eso defiende la necesidad de su propuesta, que tiene como puntos fuertes "la inmediatez, la facilidad de implementación y la llegada rápida al hogar de un dinero que supone un agobio". "Es momento de ser arriesgado", reclama Del Pozo.