Gonzalo Bernardos desvela el truco que los hipotecados españoles pueden hacer para frenar la subida del Euríbor
El economista da alguna de las claves para la mayoría de los hipotecados españoles.
El reconocido economista Gonzalo Bernardos, invitado habitual en 'Al Rojo Vivo', dejó en el programa de Ferreras algunas de claves para aquellas personas que se encuentran ahora mismo en una situación complicada como consecuencia de la subida récord del Euríbor.
El eterno debate entre qué es mejor, si tener una hipoteca con intereses a tipo fijo o variables parece que en la actualidad tiene un vencedor claro.
Actualmente, en España alrededor de un "70'5% de los hipotecados tiene un tupo de interés variable", a fecha de junio de 2022. Un dato que sirve para evidenciar el momento complicado que atraviesan los hogares españoles.
Esto quiere decir que 7 de cada 10 personas pagan en función de las subidas y bajadas del Euríbor, que actualmente se encuentra rondando el 4'5%, un porcentaje extremadamente elevado y que puede suponer un incremento de hasta 3.200 euros anuales para los bolsillos de los hipotecados.
La solución más asequible
Ante este problema de difícil solución, Bernardos no se muestra nada optimista, y asegura que estas personas "van a pagar tipos de interés que estarán alrededor del 5%", aunque sí hay una pequeña esperanza para todos ellos: cambiar de banco.
El profesor de Economía en la Universidad de Barcelona aconseja a todos aquellos que tengan una hipoteca a tipo variable, que cambien de entidad bancaria, ya que si hacen esto, muchos bancos estarán esperando para ofrecer hipotecas mixtas que se encuentran alrededor del 2'5%. Aunque esto, admite Bernardos, "no sé por cuánto tiempo".
Pero, ¿qué ganan los bancos con estos? Ya que puede parecer una maniobra sin mucho sentido, lo que los bancos buscan con esto es establecer más vínculos con el cliente, es decir, a cambio de establecer unos intereses del 2'5%, solicitan domiciliaciones de nóminas, seguros de hogar....
"(A los bancos) no les cuesta nada porque no pagan ningún tipo de interés a los particulares. Los bancos las ponen por ahora para intentar ganar clientes solventes y vincularles con muchos productos, como seguros del hogar", asegura.