China descubre un nuevo mineral estratégico
El hallazgo podría revolucionar dentro de tres años los mercados, la producción y el suministro de este material a nivel global.
El hallazgo de un nuevo mineral en un remoto yacimiento de Mongolia ha despertado a la industria y reactivado los mercados internacionales porque el descubrimiento podría tener un impacto significativo en la fabricación de aleaciones y componentes de alta tecnología. Se trata de la niobobaotita, que contiene niobio, un metal estratégico de gran valor en diversas aplicaciones industriales y tecnológicas.
La niobobaotita, según el portal Xataka, se descubrió en el depósito de Bayan Obo, en la región de Baoutou, en la Mongolia interior. Un equipo de investigadores del Instituto de Investigación de Geología del Uranio de Beijing, vinculado a la Corporación Nuclear China (CNNC), fue el encargado de realizar el hallazgo, que el comité de la Asociación Mineralógica Internacional ha reconocido con el número IMA 2022-127a.
El niobio de la niobobaotita es altamente valioso en la industria del acero debido a su resistencia y propiedades superconductoras, especialmente a bajas temperaturas. Se utiliza en aleaciones para motores a reacción, cohetes, equipos resistentes al calor y una variedad de aplicaciones industriales. Además, encuentra uso en la producción de imanes para aceleradores de partículas y equipos de resonancia magnética.
Este mineral estratégico, el niobio, también se emplea en aplicaciones como lentes de cámaras, joyería, prótesis, implantes médicos y condensadores de circuitos, entre otros. Dada su importancia y la vulnerabilidad de su suministro, tanto Australia como la Unión Europea lo consideran un "mineral crítico" y esencial para la industria tecnológica.
Hasta ahora, China importaba el 95% de su niobio, pero este descubrimiento podría hacer que el país se autosuficiente en lo que respecta la producción de este mineral estratégico, porque no se han divulgado detalles sobre el potencial del nuevo yacimiento ni los cronogramas de explotación, aunque los expertos estiman que se podría extraer y procesar en tan solo tres años, lo que podría revolucionar el suministro de niobio a nivel global.