El Barça logra un trabajado triunfo en Oporto (0-1) y el Atleti sufre para ganar a un combativo Feyenoord (3-2)
Los culés se sitúan como líderes en solitario del Grupo H y los colchoneros se aúpan también al primer puesto del Grupo E.
Noche de Champions redonda para los equipos españoles con dos victorias. El FC Barcelona ha logrado vencer a domicilio por 0-1 al que, sobre el papel, es el rival más difícil del Grupo H, el Oporto. Y el Atlético de Madrid, aunque con sufrimiento, ha logrado su primera victoria en esta edición de la máxima competición europea tras doblegar al Feyenoord por 3-2.
El conjunto culé ha conseguido el 6 de 6 puntos en las dos primeras jornadas de la fase de grupos de la Champions League gracias a un trabajado triunfo en Do Dragao, el feudo del Oporto.
Un gol de Ferran Torres al borde del descanso, en el minuto 46, hizo que la victoria cayera del lado azulgrana. El tanto llego merced a un grave error de Baró, que le regaló un balón peligroso a Gündogan. El futbolista alemán no desaprovechó la oportunidad y filtró un balón en profundidad con el que dejó solo a Ferran Torres frente al guardameta del Oporto, Diogo Costa, a quien batió con un disparo raso.
En la segunda mitad, el Oporto apretó el acelerador y dispuso de acercamientos claros, pero el buen desempeño de Ter Stegen y Koundé (que evitó un mano a mano con un gran corte) hizo que no llegara la igualada.
Además, también hubo tiempo para la polémica. En el minuto 79 el VAR anuló un penalti favorable al Oporto que el árbitro habría decretado por una mano de Cancelo. Y en el 82, se anuló por fuera de juego un gol de Taremi.
Pese a la importante victoria, el equipo comandado por Xavi Hernández vuelve a la ciudad condal con una mala noticia, la lesión de Lewandowski. El delantero polaco, a solo tres semanas del Clásico, se retiró del campo en la primera parte dolorido de su tobillo izquierdo.
Atlético de Madrid 3-2 Feyenoord
El Atlético de Madrid batió este miércoles por 3-2 al Feyenoord en la jornada 2 de la Liga de Campeones, gracias a un doblete de Álvaro Morata y a otro gol de Antoine Griezmann, que neutralizaron el acierto del cuadro de Róterdam y que además enderezaron el rumbo de los madrileños en el Grupo E, tras su anterior empate contra la SS Lazio.
Eso sí, hubo dominio inicial del Feyenoord, que cristalizó en el temprano 0-1 de Mario Hermoso en propia puerta, debido a una carambola. Casi de inmediato, Ramiz Zerrouki merodeó el 0-2 con un derechazo lejanísimo y que sorprendió a Oblak fuera de sitio. Sin embargo, los colchoneros no le perdieron la cara al choque y lograron el empate por mediación de Álvaro Morata antes de alcanzar el cuarto de hora.
Pero el equipo holandés volvió a golpear. Pasada la media hora, una falta lejana botada al área de Oblak llegó al segundo palo, donde el central David Hancko se zafó del marcaje de César Azpilicueta hasta rematar a bocajarro; aunque el arquero esloveno salvó de milagro en primera instancia, el propio Hancko marcó el 1-2 en su rechace.
Al Atlético de Madrid, como en el partido liguero frente al Cádiz, le tocaba volver a nadar a contracorriente. Y otra vez la misión fue completada con éxito. En el último de los tres minutos añadidos por Letexier, el Atlético sacó un córner que sobrepasó las cabezas de todos en el área. Lino domó la pelota en la frontal con el pie diestro, recortó hacia dentro para deshacerse de un adversario y disparó con la zurda; tras un rebote y un mal despeje, Antoine Griezmann ejecutó una pseudochilena y anotó el 2-2.
Nada más arrancar la segunda mitad, los de Simeone pillaron desprevenido a su rival. Igual que frente al Real Madrid y contra el Cádiz en recientes encuentros de la competición doméstica, el Atlético vio puerta y de nuevo Morata puso la rúbrica. Agazapado entre los centrales, el '19' colchonero puso el definitivo 3-2 en el electrónico tras emerger con un remate de zurda a un preciso centro de Nahuel Molina desde la banda derecha.
Minteh tuvo una ocasión clarísima para empatar en el minuto 72, tras una mala circulación de balón colchonera y que propició una internada del gambiano. Oblak apareció salvador con otra parada, acumulando unas cuantas a esas alturas de partido. El Feyenoord no desistió, pero los cambios introducidos por el Cholo templaron algo los ánimos.
Quedó el último arreón de los visitantes, con otra gran parada de Oblak incluida y con los fantasmas de Roma sobrevolando la mente del Cívitas Metropolitano. En un par de jugadas a balón parado, el portero rival había subido a rematar, pero en esta ocasión no hubo cabezazo alguno del momentáneo 'imitador' de Ivan Provedel.