El año tres después de Monago
Algunos no entenderán el porqué de la presentación de una moción de censura a Monago y en este momento, pero ahora más que nunca está justificada. La oposición tiene la obligación de hacer seguimiento de la labor de Gobierno, criticando lo que se hace mal y proponiendo nuevas medidas.
La denominación de nuestros calendario hace referencia a un hecho histórico dentro de la cultura cristiana el nacimiento de Jesucristo; por eso estamos ahora en el año 2014 después de Cristo. Pero eso en Extremadura ya no es así, se utiliza una nueva referencia, el inicio de una nueva era con la llegada de Monago al Gobierno de Extremadura. Estamos en el año tres después de Monago.
En su intervención durante el debate del estado de la región, Monago nos hizo creer que Extremadura no existía antes de su llegada y que Extremadura empieza con él. Basándonos en esto, la lógica razonable es que el calendario en Extremadura a partir de ahora haga referencia a la llegada de Monago al Gobierno de la región. Es lógico en un presidente que organizó una toma de posesión como si fuera un emperador romano. Incluso para ello se rodeó de todos los tesoros romanos en el museo de Mérida, algo sin precedentes.
A partir de ese momento todo han sido anuncios mediáticos para ocupar titulares en los principales medios nacionales, pero con poca repercusión sobre la vida de los ciudadanos.
Monago llegó el pasado martes 6 de mayo al debate del estado de la región con todos los elementos que él deseaba para ser coronado como gran emperador romano. Ese día nos desayunábamos con la noticia de que el paro había bajado en Extremadura en 6.380 personas en el mes de abril, algo previsible al convocar en esa fecha el debate, aunque la bajada no fuera tal por ser paro registrado pero no paro real y por las condiciones precarias de los nuevos contratos.
Monago llegó al debate cargado de anuncios mediáticos para intentar colocar como otras veces titulares en los medios de comunicación nacional, en concreto 56 medidas, pero los hechos demostraban que algo fallaba. Ni esa tarde ni al día siguiente lo consiguió en ningún medio nacional, pero lo peor estaba por llegar.
El 7 de mayo estaba reservado para la intervención del líder de la oposición, Guillermo Fernández Vara. Para que tuviera la máxima repercusión el PP desde la presidencia de la Asamblea de Extremadura lo colocó en horario de prime time a las 8 de la mañana. Pero entonces Fernández Vara lanzó un anuncio que nadie se esperaba: la presentación de una moción de censura, suficientemente justificada en los datos de los tres años de Gobierno de Monago. Caída del PIB en 750 millones de euros; la región está más endeudada, pues ha pasado del 10,9 al 16,2 del PIB, en 2011 había 381.400 ocupados y 114.800 parados; hoy hay 335.700 ocupados y 160.300 parados; Extremadura ha pasado de converger con España y Europa a divergir, es la segunda región que más ha perdido en convergencia (2,5 puntos), las inversiones por parte del Gobierno de España han caído hasta alcanzar más de 500 millones en los tres años de legislatura... Todos estos datos son más que suficientes para entender el motivo de la moción de censura.
Algunos no entenderán el porqué de la presentación de esta moción y en este momento, pero ahora más que nunca está justificada. La oposición tiene la obligación de hacer seguimiento de la labor de Gobierno, criticando lo que se hace mal y proponiendo nuevas medidas. Nadie duda de la mala situación de la región y lo que ha empeorado en los tres años de Gobierno de Monago. Por lo tanto, y teniendo en cuenta que el PP no tiene mayoría absoluta y que los votos en las últimas elecciones autonómicas se decantaron mayoritariamente por opciones de izquierda, el partido mayoritario de la oposición tiene la obligación de presentar una alternativa y que los diputados decidamos cuál es la opción de Gobierno que queremos para Extremadura.
A Monago le ha molestado mucho este anuncio, porque no tiene cabida en su estrategia de propaganda y creación de una realidad paralela. Pero los ciudadanos deben tener la oportunidad de conocer que hay otra alternativa para Extremadura, independientemente de que la moción triunfe o no. Espero que desde el PSOE aprovechemos la oportunidad de dar a conocer nuestro proyecto, con el foco mediático de la moción, y que durante estos tres años ha sido apagado por el Gobierno de Monago mediante el uso de los recursos disponibles por parte del Ejecutivo de Extremadura para hacer propaganda de Monago, restándolo de lo disponible para la promoción de la región.