¡Ay, mi madre!
Madres e hijas van de la mano y al mismo tiempo necesitan distanciarse para ser mujeres únicas, independientes, seguras de sí mismas. Un camino que no es posible sin un análisis de esta relación desde el cariño y la necesidad de reconciliarse con el mundo.
¿Qué puedo yo decir de las madres, que no sepáis? ¿Cómo expresar todo lo que son, lo que aportan, lo que limitan, lo que enseñan, lo que inspiran, lo que temen, lo que dan, lo que quitan, lo que sufren, lo que desconocen, lo que saben, lo que viven, lo que juzgan, lo que fallan, lo que aciertan, lo que nos hacen aprender?
El camino con nuestras madres tiene momentos dulces, pero también difíciles. Es un vínculo intenso. Tanto, que a veces cuesta cortar el cordón umbilical. O bien porque ellas se resisten, o bien porque los hijos y las hijas se acomodan en esta dependencia.
Fotograma de Històries de mare i filla.
Si hablamos exclusivamente de la relación madre-hija, todo se intensifica: las alegrías, las penas, las concesiones, los despechos, las satisfacciones, los enfados, las risas, el orgullo, los llantos, la rabia, la comprensión, los silencios, las palabras, la escucha, la indiferencia, los miedos y la valentía. En ocasiones, ¡puede ser un cóctel explosivo!
Madres e hijas van de la mano y al mismo tiempo necesitan distanciarse para ser mujeres únicas, independientes, seguras de sí mismas. Un camino que no es posible sin un análisis de esta relación desde el cariño y la necesidad de reconciliarse con el mundo. Porque en gran parte son ellas, nuestras madres, las que nos abren los ojos ante la realidad que nos toca vivir, las que nos acompañan en el camino de la vida, con su mirada atenta y protectora. Así es, por mucho que se equivoquen, mirando a través de cristales rotos o de color distorsionado.
¡Cuánta responsabilidad tienen las madres! ¡Y cuánto peso les recae! Pocas veces somos conscientes de las dificultades que han ido esquivando para traernos al mundo, para cuidarnos, para educarnos y dejarnos volar libres. No hay libro escrito sobre las pautas adecuadas a seguir, pues la realidad es tan rica y cambiante, que cada una improvisa su propio manual de acciones diarias: desde la intuición, el amor, la practicidad, las limitaciones de tiempo y las posibilidades de cada una.
Otro tema importante es el de las opiniones de las madres. Desde pequeñas, sentimos que sólo nos pueden decir la verdad. Pero por suerte, con el tiempo, nos damos cuenta de que no es así y de que sus opiniones no son sentencias. Se trata de saber cómo y cuándo distanciarnos de ellas, para ser más objetivas, críticas y comprensivas. Es aquí donde empieza el verdadero entendimiento mutuo: con esa distancia que nos acerca, que nos revela algo que tiene que ver con el sentido de la vida, con el tocar con los pies en la tierra.
Fotograma de Històries de mare i filla.
Cuando, por tercera vez, el Programa Municipal para la Mujer del Hospitalet del Llobregat (PMD) me encargó un documental basado en los talleres que organiza en las asociaciones de mujeres de la ciudad, me dijeron que fuese yo quien propusiese algún tema. Sin pensar mucho, me surgió éste: el de madres e hijas.
Desde el principio, supimos que sería complicado mostrar en un audiovisual las múltiples facetas posibles de este vínculo, sin caer en tópicos como la idealización de la maternidad, o sin sacar a la luz cómo a veces la relación entre madres e hijas es realmente complicada y dolorosa.
Aún así, seguimos adelante y descubrimos historias muy emotivas y, a su vez, variadas: unas plácidas, otras más complicadas; unas basadas en el aprendizaje y otras, en el conflicto aún sin resolver. No todas las mujeres que participaron pudieron aparecer. Pero todas igualmente forman parte de un bagaje de aprendizaje, en el que las miembros del equipo nos sentimos muy implicadas. Creo que todas nos transformamos en el camino. Y que al ver Històries de mare i filla (Historias de madre e hija), madres, hijas, hermanos, padres... todos os podéis identificar, en algún momento, con alguna de las vivencias que explican sus protagonistas.
El pasado 8 de marzo, se emitió en horario prime time por el Canal 33 y obtuvo una muy buena audiencia. Ahora, si os apetece verlo, hasta el 29 de junio, lo encontráis en este link del programa DOC'S de Barcelona Televisió. Tanto el PMD, impulsor de este proyecto audiovisual, como las cuatro personas que elaboramos este documental, estamos muy satisfechas de que este trabajo genere interés mediático. Porque es producto de un quehacer diario a favor de una mejor calidad de vida de las mujeres, de las madres, de los hijos, de los hermanos, de los nietos... de toda una sociedad.