Yo wasapeo, tú wasapeas, nosotros wasapeamos
De los iniciales «Te mando un mensaje por WhatsApp» o «Está todo el día escribiendo en WhatsApp» pasamos, con la popularización de este servicio, a escuchar frases como «No recibo tus wasaps» o «No para de wasapear».
Muchas de las dudas que se nos plantean con el lenguaje no surgen cuando nos comunicamos oralmente, sino cuando nos ponemos a escribir.
En el habla creamos palabras con mucha facilidad, por ejemplo, para dar nombre a nuevas realidades, a acciones concretas o simplemente para divertirnos.
Lo hacemos con naturalidad, pues fabricamos términos siguiendo las pautas que tenemos interiorizadas: usamos unos sufijos que siempre forman verbos (curiosamente los verbos que nos inventamos son siempre de la primera conjugación); con otros creamos adjetivos, sustantivos, adverbios...
Muchas de esas creaciones responden a necesidades comunicativas específicas, lo que en ocasiones provoca que vayan saltando de un registro a otro hasta que se extienden entre una gran número de hablantes. Su popularidad hace que de lo oral pasen a lo escrito y es aquí donde suelen surgir problemas.
Más o menos este es el camino que han recorrido las palabras que hemos generado los hablantes para referirnos a las acciones que desarrollamos con la aplicación móvil WhatsApp.
De los iniciales «Te mando un mensaje por WhatsApp» o «Está todo el día escribiendo en WhatsApp» pasamos, con la popularización de este servicio, a escuchar frases como «No recibo tus wasaps» o «No para de wasapear».
Es decir, se ha formado un nuevo sustantivo que da nombre al mensaje que se envía a través de esta plataforma y un verbo que define la acción de hacerlo.
Pero estas palabras no se han quedado en ámbitos orales ni registros coloquiales, sino que han llegado a los medios de comunicación escritos y es en este momento donde se ha planteado el problema: ¿cómo lo escribimos?
Cada vez aparecen más en las noticias términos relacionados con esta aplicación que se escriben de formas muy dispares: wasapear, guasapear, whatsapear, WhatsAppear...
Las diferentes grafías que se emplean parece que no siguen ningún criterio. Por ello, y por las consultas que recibíamos en la Fundación del Español Urgente acerca de la escritura de estas palabras, nos pusimos a trabajar en una recomendación sobre este asunto para tratar de ofrecer una respuesta con una base lingüística.
Tras plantearlo en la reunión de redacción y llevarlo más tarde a nuestro Consejo Asesor, se acordó proponer las respectivas adaptaciones al español, como ya sucedió, por ejemplo, con tuitear, tuit, tuitero, etc.
En este caso el criterio que seguimos para nuestra propuesta fue el que recoge la Ortografía de la lengua española (2010), obra que señala que la letra w es apropiada para representar la secuencia /gu/ (web, waterpolo).
De este modo, la adaptación del nombre del mensaje sería wasap (te mando un wasap, envié dos wasaps) y el verbo, wasapear.
También podría resultar admisible la adaptación guasapear, pero al perderse la referencia a la marca original y percibirse como más coloquial, se prefieren las formas con w.
Es solo una propuesta que pretende dar una respuesta a una duda reciente. Pero, como siempre, el uso, los hablantes, que somos los dueños del idioma, las emplearemos y las estandarizaremos o las desecharemos.
Lo que está claro, y así se recoge en nuestra nota, es que WhatsApp, como nombre comercial, tiene que escribirse así, respetando la grafía original: «Te escribo por WhatsApp».
Ilustración: @MoxParadox.
Otras recomendaciones (de actualidad informativa) de esta semana, en breve:
Tras los incidentes con los neumáticos Pirelli en las carreras de Fórmula Uno, el fabricante ha decidido incorporar un nuevo componente: el Kevlar, un término que debe escribirse con la inicial en mayúscula por ser el nombre propio de una marca registrada.
Adli Mansur, mejor que Adly Mansur o Adly Mansour es la transcripción adecuada al español del nombre del juez egipcio que ha asumido la presidencia interina de Egipto.
Con motivo de las Fiestas de San Fermín que se celebrarán del 6 al 14 de julio en Pamplona (España), ofrecimos algunas recomendaciones para escribir correctamente las informaciones sobre ellas que pueden consultarse en el enlace.
A raíz de la decisión del rey Alberto II de Bélgica de poner fin a su reinado, recordamos que el verbo abdicar, que significa 'ceder un monarca la soberanía sobre su reino', como transitivo se construye sin preposición (abdicar el trono), y cuando funciona como intransitivo le sigue un complemento introducido por de, no por a, (abdicar del trono) tal como indica el Diccionario panhispánico de dudas.
Concurso de talentos es una alternativa adecuada en español al anglicismo talent show, una denominación que pudo verse en las muchas noticias que se publicaron sobre la final del programa televisivo Master Chef.
El término económico quita también es adecuado para referirse a la reducción de los activos bancarios que las entidades financieras aplican a los suscriptores de determinados productos.
Aunque quita aludía originalmente solo a la remisión total o parcial de una deuda que hace el acreedor al deudor, su proximidad con el significado del verbo quitar, del que deriva, ha hecho que esa palabra amplíe su significado en el uso cotidiano y en el de los medios de comunicación, y pase a designar esta nueva realidad, que no responde de forma precisa a la definición original.