El Festival Internacional de Cine de Colombia en Nueva York
Este Festival de cine lo he creado con mi socio Juan Carvajal, con el propósito de ayudarle al pueblo colombiano a hacer catarsis y a exorcizar el dolor de décadas a través del cine. Este año las películas premiadas fueron aquellas cuyas producciones se basaron en historias reales.
Fui reportera de guerra a finales de los años 80 y comienzos de los 90. En
siete años recorrí todos los rincones de Colombia y pude evidenciar la brutalidad
de la guerra en sus más bajas dimensiones. Mi trabajo consistía en caminar en un peligroso filo y en medio de muchos fuegos cruzados.
Me retire de los medios de comunicación en 2004. Por una amenaza de la
guerrilla tuve que abandonar mi país y fue así como llegué a los Estados Unidos. Aquí comencé de nuevo. Con el apoyo del Gobierno pude trabajar en el Consulado de Colombia en donde me centré en el área cultural y en ayudar a mi país a salir de su anonimato en Nueva York.
Este Festival de cine lo he creado con mi socio Juan Carvajal, con el propósito de ayudar al pueblo colombiano a hacer catarsis y a exorcizar el dolor de décadas a través del cine. Nosotros le damos voz al pueblo invisible y olvidado, a aquellos nuevos y desconocidos contadores de historias que carecen de oportunidades en Colombia. Este año las películas premiadas fueron aquellas cuyas producciones se basaron en historias reales.
La Tierra en la Lengua, de Rubén Mendoza, que ganó el premio a mejor película de ficción, cuenta la historia de un terco y viejo ganadero de los llanos orientales que no le teme a la muerte, pues estuvo expuesto al secuestro, a la extorsión y a morir de mil maneras.
La película Las Tetas de mi Madre, ganadora al premio a la mejor película 100
colombiana, narra la historia de infancia del director Carlos Zapata, una
historia estremecedora de un niño que nace y crece en el barrio el cartucho en Bogotá y evidencia cómo su madre cae en el abismo de la prostitución y las drogas.
Jardín de Amapolas, de Juan Carlos Melo, ganó el premio del público y cuenta la historia de dos niños y cómo su inocencia se rompe por la barbarie de un grupo armado.
La Eterna Noche de las Doce Lunas, de Priscilla Padilla, un documental que
estremece con la historia de las costumbres de las mujeres Wayuu y que
enloquece con los sonidos de la naturaleza, los cantos indígenas y el esplendor de un lugar desconocido para el mundo.
El jurado internacional estuvo conformado por el tres veces ganador del Oscar Chris Newman, el director de cine Peter Webber, la exdirectora de Sundance Nicolle Guillimet, el comisario del Tribeca Film Festival Loren Hammond, la escritora y periodista Silvana Paternostro y la curadora del festival de cine en Mar del Plata Soledad Correa, quedó impactado con la calidad de las historias.
La película ganadora en la categoría de ficción La Tierra en la Lengua irá a competir en el Festival de Cine de Oslo Noruega, las otras ganadora también irán como invitadas al festival de cine de Sao Paulo Brasil.