El Brexit, la inestabilidad política de Europa... hacen tambalear el mercado del lujo
El Brexit y la inestabilidad política provocan un parón en las ventas de este sector.
No es oro todo lo que brilla. O al menos así se pone de manifiesto en los resultados empresariales del sector del lujo correspondientes al tercer trimestre y que hemos conocido en los últimos días. Cuando parecía que lo peor había pasado y que, a juicio de grandes consultoras como Bain, el sector está viviendo un momento "dulce" de recuperación, no parece que todo esté tan claro. Europa, tercer mercado del lujo a nivel mundial por ventas, tras Estados Unidos y China, se resiente de nuevo. La inestabilidad política y las dudas sobre la evolución económica de los principales mercados —entre ellos el italiano y el alemán— están afectando directamente a las compras de los consumidores.
La firma italiana de calzado y marroquinería Ferragamo alertaba la semana pasada de la ralentización en el consumo. Sus resultados acumulados durante los primeros nueve meses del ejercicio han caído un 3,3% debido a la debilidad de las ventas, sobre todo en Europa. Tres cuartos de lo mismo le ha sucedido a la firma estadounidense Michael Kors que, además de luchar por una identidad propia dentro del sector del lujo asequible en Europa, ha visto como se desplomaban sus ventas en tiendas en torno a un 10% en países como Francia, Alemania u Holanda. Estas son llamadas de atención a la ralentización del sector, pero sobre todo de aquellos productos que no suponen un esfuerzo excesivo dentro del lujo.
Tod´s era la tercera empresa que hacía un llamamiento a la moderación en las casas de análisis sobre la evolución de las ventas para el ejercicio 2018. Con una caída del 2,2% en las ventas, la empresa italiana considera que viene un tiempo de moderación en el que las marcas tienen que seguir buscando su esencia y regresar a sus orígenes, tanto en calidad como en las direcciones creativas. En este caso, sus mocasines siguen siendo el modelo de calzado icónico de la marca y todas las variaciones en el mercado femenino no han terminado de cuajar. Mulberry, la firma británica de bolsos de lujo en proceso de reposicionamiento en los mercados, también presentaba resultados complicados, en este caso por el efecto Brexit y el parón evidente del consumo.
Frente a las pequeñas y medianas empresas del lujo, las grandes firmas siguen siendo incontestables. Es el caso de Hermès que, a pesar de las dudas, ha presentado resultados robustos y buenas expectativas de ventas en lo que queda de ejercicio, sobre todo por el tirón de China y porque, como otras marcas como Louis Vuitton o las que pertenecen a Kering, tienen clientes fieles independientemente de los vaivenes del mercado. Su política de centrarse en el super lujo en los últimos 14 meses, deshaciéndose de aquellas marcas que no coincidían al 100% con esta visión, da sus resultados y afianza sus beneficios, tanto en Europa como en el resto del mundo.