El Congreso de los Diputados ha aprobado este jueves, con los votos a favor de todos los grupos parlamentarios salvo la abstención del PP y Ciudadanos, el decreto de modificación de la Ley de Memoria Histórica que permitirá exhumar los restos del dictador Francisco Franco del Valle de los Caídos.
En defensa del decreto, la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo, ha alertado de que no habrá "paz sin justicia" mientras se mantenga la "atroz anomalía" que supone que el dictador esté enterrado junto a sus víctimas, al tiempo que ha criticado a PP y Ciudadanos por "ponerse de perfil" frente a la dictadura.
Del otro lado, PP y Ciudadanos han criticado que la exhumación de Franco se haga por decreto cuando no está justificada su urgencia 43 años después de su muerte y han acusado al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de utilizar este asunto como una "cortina de humo" para tapar su incompetencia y su debilidad.
Los diputados que han apoyado el decreto han roto en aplausos y han dirigido sus miradas hacia la tribuna de invitados, en la que seguían el debate víctimas de la dictadura y el hispanista e historiador Ian Gibson.
Pese a la abstención anunciada por el PP, dos diputados de este grupo han votado en contra de la exhumación de Franco: el expresidente del Congreso Jesús Posada y el diputado José Ignacio Llorens, aunque fuentes del PP han asegurado a EFE que se ha tratado de un error.
Además de la convalidación del decreto, el Congreso ha aprobado que se tramite como proyecto de ley, lo que permitirá introducir enmiendas al texto durante su tramitación parlamentaria.
Sus restos se encuentran en el Valle De los Caídos, lugar de culto para todos aquellos que apoyan el régimen del dictador.