Israel gana Eurovisión 2018 y España queda 23ª con Alfred y Amaia
Este año sí se han llevado los gallos.
Partía como favorita y las votaciones lo confirmaron: Netta Barzilai, la representante de Israel, ha ganado Eurovisión 2018 con la canción Toy. Durante su interpretación la cantante imitaba en varios momentos el cacareo de una gallina, lo que no deja de ser irónico: el año pasado el representante español, Manel Navarro, soltó un enorme gallo y quedó último, en el puesto 26.
No era difícil que este año el resultado de España fuera algo mejor, aunque no cumplió las expectativas que se habían generado con Alfred García y Amaia Romero. Almaia, dúo salido de Operación Triunfo, defendió Tu canción pero no convenció: quedaron en el puesto 23º con 61 puntos.
Estos han sido los momentos más destacados de la noche en la que los gallos volvieron a ser protagonistas:
Alfred y Amaia, impecables
Los triunfitos actuaron los segundos, en el llamado puesto maldito: en las 62 ediciones anteriores del festival ningún país que ha salido al escenario en segundo lugar ha conseguido ganar.
Pese al mal resultado en puntos, Alfred y Amaia unieron sus voces en una actuación sin fallos —¡y sin gallos!—, marcada por continuos movimientos de cámara de la realización. Fueron tantos que, de hecho, en la retransmisión no se pudo apreciar si hubo beso final o no, aunque después sí que los pillaron de lo más acaramelados.
El momento 'espontáneo'
Pocos minutos después del paso de Almaia por el escenario se vivió uno de los momentos más desagradables de la noche. Un espontáneo se coló en la actuación de la representante de Reino Unido, SuRie, mientras defendía su tema Storm.
El espontáneo llegó a arrebatarle el micrófono. Debido al incidente, la organización le ofreció la posibilidad a la cantante y a su equipo de repetir la actuación —algo que ya le ocurrió a Daniel Diges, que volvió a cantar al final de la noche por culpa de Jimmy Jump—.
Como informó en un comunicado la organización, SuRie rechazó volver a cantar porque la delegación británica "estaba extremadamente orgullosa de su actuación" y "no había motivo para repetirla".
El tuit más polémico
Precisamente desde Reino Unido llegó un tuit que hizo que muchos levantaran las cejas. La cuenta oficial de la BBC sobre Eurovisión publicó un mensaje con una fotografía de la actuación de Alfred y Amaia junto a la frase: "¿Cómo se dice en español 'idos a un hotel?".
El tuit no sólo fue compartido miles de veces, sino que recibió decenas de comentarios, muchos de usuarios españoles que proponían la traducción y muchos otros de asombro.
El regreso de Sobral
El portugués Salvador Sobral, vencedor de la anterior edición, volvió al certamen y de nuevo emocionó al público y a los espectadores. Especialmente bonito fue el momento en el que cantó Amar pelos dois, el tema con el que ganó, junto a Caetano Veloso.
Su regreso al Festival tenía mucho significado, ya que en diciembre se sometió a un trasplante de corazón y tuvo que estar un tiempo alejado de los escenarios.
No hay puntada sin hilo
Amaia y Alfred vistieron moda española para la final, ella con un vestido de Teresa Helbig y él con una americana granate de Paco Varela. La chaqueta llamó la atención de muchos debido a unos motivos que llevaba bordados en el hombro y la manga. Según explicó el propio diseñador, es un guiño al mar.
Otro de los estilismos que más llamó la atención durante la gala —en la que se vio hasta a un Drácula— fue el de Elina Nechayeva, la representante de Estonia. La falda de su vestido era en realidad una gran superficie en la que se proyectaban imágenes.
El efecto quedó espectacular... e igual de impactante era el precio de la prenda: 65.000 euros.