Berlusconi da luz verde a un gobierno de La Liga y 5 Estrellas para destrabar la crisis política en Italia
Se ha logrado un acuerdo in extremis, cuando el presidente Mattarella ya reconocía que las nuevas elecciones serían casi la única salida viable.
El exprimer ministro italiano Silvio Berlusconi ha dado su consentimiento a una coalición de gobierno entre La Liga, aliado electoral de Forza Italia -el partido de Berlusconi-, y el Movimiento Cinco Estrellas (M5S) para superar la parálisis política provocada por las elecciones generales del 4 de marzo.
"Si otra fuerza política de la coalición de centro-derecha cree que puede asumir la responsabilidad de formar gobierno con el Movimiento Cinco Estrellas, tomamos nota de esta decisión con respeto", ha dicho Berlusconi en un comunicado.
El ex primer ministro ha aclarado que, aunque la alianza entre La Liga y Forza Italia se mantiene, el grupo parlamentario de su partido político no votará a favor de este eventual gobierno de coalición por "respeto a los votantes".
Así, ha defendido que "la solución más natural, más lógica y más coherente con el mandato de los votantes para esta crisis sería un gobierno de centro-derecha (...) dirigido por La Liga". "El M5S ha demostrado en estas semanas que no tiene la madurez política necesaria para asumir esta responsabilidad", ha sostenido.
Berlusconi ha subrayado además que, una vez dado este paso, nadie podrá usar como "excusa" a Forza Italia o a su líder para justificar "la incapacidad o la imposibilidad objetiva de llegar a un acuerdo entre dos fuerzas políticas tan distintas". "No se nos puede pedir más", ha remachado.
In extremis
Estos días se había especulado con que Forza Italia se haría a un lado para permitir el acuerdo de gobierno entre La Liga y el M5S, si bien el propio Berlusconi lo negó el martes, abocando así a la nación transalpina a unas segundas elecciones.
La coalición conservadora formada por La Liga, Forza Italia y Hermanos de Italia ganó el 4 de marzo en suma de votos, pero el M5S fue el partido más votado. Desde entonces, los de Matteo Salvini y Luigi di Maio han estado explorando un pacto de gobierno que ha sido imposible por el veto del partido antisistema a Berlusconi.
El presidente italiano, Sergio Mattarella, anunció el lunes, tras la última ronda de contactos, que era imposible formar gobierno en la actual situación y planteó dos opciones: un gobierno "neutral" que esté en pie hasta diciembre o elecciones inmediatas.
La Liga y el Movimiento 5 Estrellas abogaron por volver a sacar las urnas en verano, si bien este miércoles han pedido 24 horas más a Mattarella para intentar dotar a Italia de un gobierno.