Dakota de 'Hermano Mayor' vuelve a 'Cámbiame' para arreglar el desastre
La joven se considera una 'víctima' del programa y se pone en manos de Pelayo.
Drástica hasta la médula. Conocida en su ciudad por estar metida en todos los fregaos y por estar vetada en los bares debido a su implicación en peleas, Dakota Tárraga apareció en nuestras vidas hace cinco años de la mano de Hermano Mayor (Cuatro).
Con el programacomprobamos cómo le gustaba destrozar todo el material de su alrededor. Pero Pedro García Aguado logró convertir al torbellino en un bálsamo de aceite, y el terror se esfumó con sus malas pulgas.
Cinco años después, la joven ha querido acompañar su cambio espiritual de uno físico, y para ello acudió este lunes a Cámbiame(Telecinco). Así llegó, para ponerse en manos de Cristina Rodríguez.
Pero el bálsamo volvió a burbujear y despertó al volcán. No es para menos porque, amigos seriéfilos... ¿No os recuerda a alguien? Exacto, Cristina Rodríguez parece haberse inspirado en el look de Helena, de Orphan Black.
El programa de Cuatro le cambió, según decía al llegar a su final, pero parece que no ha durado demasiado. La transformación en Telecinco ha vuelto a sacar a la bestia. De hecho, ha tenido que volver este martes por segunda vez para que le den un 'recambio'. Más abajo verás el resultado final.
La primera vez, Cristina Rodríguez confesó que le tenía miedo. Si la estilista pensó que podía dulcificar a Dakota, a la que su madre no le podía ni mirar por las movidas que montaba cuando le picaba la nariz. La tensión entre ambas se mascó inmediatamente en el ambiente.
De hecho, en cuanto en el primer programa se atrevió a meterle la tijera en el pelo y Dakota vio el resultado más corto y de otro color, los gritos en medio de la peluquería superaron los decibelios de los secadores: "Me habéis jodido la vida", decía, aumentando la tensión de Cristina. "Ahora me sacáis ante toda España y que me vea lo que me has hecho en el pelo", seguía gritando.
Para reconducir su camino, esta segunda vez el domador ha sido Pelayo, que se ha resistido al tijeretazo en el cabello. Y como la cosa iba de cabellos, Dakota no ha tenido pelos en la lengua para decir lo que le provocan los estilistas de Cámbiame: ninguno le despierta simpatía. "La única que me caía bien era tu compañera, la que se piró (Natalia Ferviú)", declaró, aunque ahora con el toque de Pelayo ha quedado más satisfecha. Que cierren la puerta del plató, por si cambia de opinión...