Esta es la mejor edad para practicar sexo, tanto para hombres como para mujeres
Cuando somos jóvenes, el sexo es muchas veces una carrera para empezar la penetración. Cuando el objetivo deja de ser ésta, el sexo mejora mucho.
La edad solo es un número, sobre todo a la hora de disfrutar del sexo.
Según el informe anual de Singles in America (solteros de Estados Unidos), los millennials que usan Tinder y Grindr no son quienes practican el sexo más satisfactorio. De hecho, son sus padres y sus abuelos: las mujeres solteras dijeron que la edad media a la que más se disfruta el sexo es a los 66 años. En el caso de los hombres, la edad media baja a los 64.
Este descubrimiento, basado en una encuesta a 5.000 personas solteras de todas las edades, etnias y niveles económicos de Estados Unidos, no ha resultado sorprendente para los terapeutas sexuales. El sexo tiende a mejorar una vez que has aprendido que la atracción sexual no se basa solo en el aspecto físico. Por desgracia, esa es una lección que muchas personas tardan años en aprender, según Vanessa Marin, terapeuta sexual y creadora de Finishing School, un curso en línea para ayudar a las mujeres a alcanzar el orgasmo.
"Entre mis clientas venteañeras y treintañeras, los complejos son un factor fundamental que les impide disfrutar del sexo: los jóvenes le dan demasiada importancia al aspecto de sus cuerpos, a cómo lo están haciendo y a lo que piensa la otra persona. Al final, eso se pasa. Incluso de los 20 a los 30 hay un descenso notorio en los complejos", comenta Vanessa Marin.
La anterior encuesta también supone un importante contraste con respecto a la extendida creencia que hay acerca del sexo más allá de los 50 años. ¿Por qué nos preocupa ir cuesta abajo una vez que llegamos a cierta edad?
En parte, porque el cuerpo sí que cambia al envejecer, por lo que el sexo también lo hace, según Celeste Hirschman, terapeuta sexual y coautora del libro Making Love Real: The Intelligent Couple's Guide to Lasting Intimacy and Passion junto con su socia Danielle Harel.
Al llegar a la mediana edad, los cuerpos pueden no estar tan en forma como antes, por lo que el propio sexo puede suponer nuevos desafíos: las mujeres pueden sufrir dolores o sequedad debido a la menopausia y muchos hombres sufren eyaculación precoz y disfunción eréctil.
Aun así, hay soluciones alternativas que logran en muchos casos que el sexo sea tan placentero como lo era antes o incluso más.
"Sí, ciertas clases de sexo se vuelven complicadas, pero la ventaja es que estos cambios generalmente hacen que la comunicación y la creatividad pasen a ser mucho más importantes. Cuando somos jóvenes, el sexo es muchas veces una carrera para empezar la penetración, sin muchos preliminares ni fantasía. Cuando el objetivo deja de ser solo la penetración, la gente se vuelve más creativa y el sexo mejora mucho", expone Celeste Hirschman.
Darse cuenta de que el orgasmo y la penetración no lo es todo puede suponer un enorme cambio, independientemente de la edad. De hecho, Celeste Hirschman señala que una clienta le confesó en una ocasión que el mejor sexo que había practicado en su vida había sido con un hombre con disfunción eréctil.
"Estuvieron juntos un año más o menos y ella aseguró que había tenido los mejores orgasmos de su vida y que él también había tenido orgasmos, solo que no mediante la penetración", comentó.
A más edad, menos presión
Otro motivo por el que el sexo más allá de los 50 puede ser tan placentero es porque cuanto mayor te haces, menos presionado te sientes para mantener los papeles del sexo y estar a la altura de las expectativas, según Kimberly Resnick Anderson, una terapeuta sexual.
Lo anterior es especialmente cierto en el caso de las mujeres mayores, muchas de las cuales se han pasado la veintena y la treintena buscando una pareja con quien formar algún día una familia.
"Esa búsqueda muchas veces condiciona lo que están dispuestas a hacer y aguantar las mujeres de 20 y 30 años. Al hacerse mayores, se vuelven más egoístas en el buen sentido: no más preocupaciones por quedarse embarazadas, no más preocupaciones por posibles interrupciones de los niños... Además, muchas mujeres se sienten más cómodas con su cuerpo y tienen una consciencia sana de que tienen derecho a buscar su propia satisfacción sexual", argumenta Kimberly Resnick Anderson.
Como esta misma terapeuta explica, las mujeres (y los hombres) de más de 50 años por fin "están adueñándose de su propia sexualidad" y cosechando los beneficios. Las perspectivas más modernas y progresistas del sexo permiten que las mujeres disfruten de su sexualidad de un modo que no podían hace 30 o 40 años, y Kimberly Resnick Anderson señala a sus clientas como ejemplos.
"Tras 40 años fingiendo orgasmos, una clienta de 63 años por fin conoció su cuerpo y se dio cuenta de qué era lo que de verdad le daba placer a ella. El sexo a los 65 o a los 70 puede ser despreocupado y sencillo porque se centra más en el placer y en el vínculo y menos en cómo lo haces o en 'dar buena imagen", manifiesta Kimberly Resnick Anderson.
Celeste Hirschman asegura que los jóvenes harían bien en adoptar esa misma confianza en el plano sexual: "Como terapeuta sexual, espero que las personas empiecen a conocerse sexualmente a sí mismas a una edad más temprana y que se sientan cómodas pidiéndoles a sus parejas lo que quieren".
Y sentencia: "Reducir el pudor y las críticas que hay en torno al sexo supondrá más gente practicando un sexo estupendo a cualquier edad".
Este artículo fue publicado originalmente en el 'HuffPost' Estados Unidos y ha sido traducido del inglés por Daniel Templeman Sauco.