Los peores regalos de San Valentín hechos por exparejas
¿Y tú? ¿Cuál es el regalo más cutre que has recibido un 14 de febrero?
San Valentín: ese día en el que las expectativas y los precios se disparan. Pero no tienes por qué gastar una barbaridad de dinero para satisfacer a tu media naranja, basta con un pequeño gesto que demuestre que han pensado en ti.
Desafortunadamente, parece que hasta eso es demasiado pedir para algunas personas. A continuación, se incluyen algunos testimonios de lectores sobre los peores regalos de San Valentín que les han hecho sus exparejas.
1. "Me pagó la reparación de los frenos del coche. Después, cuando se enteró de que necesitaba reparar otras partes, me hizo pagar el resto de la factura". ― Sara S.
2. "Me dio una tarjeta regalo por importe de 80 euros para un spa, pero la tarjeta estaba gastada y había caducado hacía dos años". ― Carey V.
3. "Nos compró a mí y a mi mejor amiga dos regalos prácticamente idénticos. Resulta que llevaba varios años pillado por ella". ― Heather B.
4. "El peor regalo que me ha hecho un ex es no regalarme nada. En otras circunstancias, no me hubiera molestado, pero una semana antes de San Valentín, mi ex me dijo que se había intercambiado regalos con todos los hombres con los que había estado y que teníamos que hacer lo mismo. Así que le compré un regalo, y cuando le pregunté por el suyo me dijo que se le había olvidado". ― Matt S.
5. "Una Biblia y una sermón diciéndome que iba vestida de forma 'inapropiada' por llevar ropa ajustada". ― Diana B.
6. "Mi ex me había prometido que me iba a encantar su regalo. 'Es algo que podemos hacer juntos', me aseguró. Estaba convencida de que se trataba de un viaje. Aquella noche me dio un sobre en medio de una cena romántica. Lo abrí esperando encontrarme dos billetes de avión. Pero lo que había era un recibo de un abono para un año en el gimnasio. Cuando te regalan esto en San Valentín solo puedes decir una cosa: 'Adiós". ― Amy K.
7. "Una escapada de fin de semana con su hermano y su mujer. No se llevaba bien con su hermano y pensó que pasar tiempo los cuatro juntos le vendría bien. Huelga decir que ese regalo narcisista (que implicaba pasar 60 horas encerrado con ella y su hermano) fue horrible para mí y para la mujer de su hermano. Pero ya se sabe que mal de muchos...". ― Bill D.
8. "Invitó a una 'amiga' soltera a cenar y al cine el día de San Valentín. Parece que les fue bien... ahora están comprometidos". ― Deanna G.
9. "Hubo un año que mi ex no quiso hacer planes, ni compró tarjetas, postales, flores o regalos. Yo supuse que la ausencia de regalos significaba que más tarde habría una gran sorpresa. Más tarde fuimos a pasear por un mercado de nuestro barrio con puestos llenos de bombones, adornos y tarjetas. Él cogió una tarjeta, la compró y me la dio sin ni siquiera firmarla, en la misma cola del cajero". ― Abby K.
10. "El día de San Valentín coincidía con su cumpleaños, de modo que era 'su' día. En diez años que estuvimos saliendo juntos nunca le compré nada". ― Gianna K.
11. Un retrato de mí y de mi perro. La intención era buena, pero el dibujo era horrible. Yo parecía una jugadora de fútbol americano con un peinado extraño. Mi ex quería colgar el cuadro encima de la chimenea, pero yo me negué. Finalmente le dejé colgarlo en nuestra habitación, y tuve que dormir bajo él durante varios años. Solía bromear diciendo que tendría que quemar la casa para librarme de esa cosa, porque me resultaba imposible tirarlo a la basura sin que me viera". ― Trish S.
12. "Desde luego, no me regaló un ramo de flores, no. Más bien me regaló una desagradable sorpresa, ya que el cartero trajo una tarjeta para mi marido enviada por otra mujer". ― Lisa F.
13. "Un arco y una flecha. Quería que fuera a cazar con él... el día de San Valentín. Se veía venir". ― Carla E.
14. "Una máquina para hacer gofres, que no sería tan mal regalo si no fuera porque no me gustan los gofres. Llevábamos cinco años saliendo, habíamos desayunado juntos cientos de veces y jamás había pedido gofres, jamás. Él tampoco me había hecho gofres nunca, y no era un problema, porque no me gustan. Pero lo mejor de todo fue que, unas semanas después, me enteré de que había ganado la máquina en una recaudación de fondos de su empresa. Evidentemente, ya no estamos juntos". ― Julie S.
Este artículo fue publicado originalmente en el 'HuffPost' Estados Unidos y ha sido traducido del inglés por María Ginés Grao.